Narrador en tercera persona
Lisa estaba sentada en su lugar, con los apuntes frente a ella, pero su atención estaba completamente dispersa. Cada tanto, sus ojos se encontraban con los de Cristian, y ambos intercambiaban una sonrisa rápida que duraba solo un par de segundos antes de que se apartaran la mirada. Esa sonrisa le provocaba una mezcla de alivio y culpa; el recuerdo de su comentario impulsivo hacía que sintiera remordimiento. Había pasado demasiado tiempo desde que habían tenido ese malentendido, y no podía quedarse callada más.
Respiró hondo, reunió coraje y se levantó de su asiento. Caminó hacia el escritorio de Cristian, que levantó la mirada, sorprendido por su determinación.
—Profesor —comenzó, con un hilo de nervios en la voz—. El otro día dije algo que estuvo totalmente fuera de lugar… sobre que usted estaba coqueteándole a las alumnas. Estuvo mal y quería disculparme.
Cristian la miró con calma, ladeando la cabeza.
—No hace falta —respondió con serenidad—. Entie