Capítulo 10: La llama en el hielo

Sebastián

El beso duró un segundo y una eternidad. No fue la necesidad ciega y voraz de hace seis años, sino el reconocimiento, la admisión de que el fuego no se había extinguido, solo había estado latente, esperando el momento de la tregua para estallar.

Cuando nos separamos, la respiración de Aitana era agitada y sus ojos, aún brillantes por la luz de la luna, me miraban con una mezcla de pánico y rendición.

—Sebastián, no. —Susurró, la voz apenas audible.

—Sí —repliqué, rozando su labio inferior con mi pulgar—. Sí, Aitana. Esto es lo que pasa cuando dos personas con un pasado así se ven forzadas a la proximidad. La negación se acaba.

Se levantó de golpe, alejándose del borde del porche, como si mi tacto la quemara.

—No podemos. No ahora. Estamos en medio de una guerra legal. Tú me acabas de demandar.

—Y tú me acabas de besar. ¿Qué es más importante? La ley o lo que hay entre nosotros?

—¡Isabella! Ella es lo único importante. No voy a complicar su vida con nuestra... nuestra indiscr
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP