BLAIR
Por alguna razón no pude llorar al pensar en el abuelo, pero el sentimiento de dolor estaba ahí, y lo estuvo por un largo rato, hasta que pude centrarme y darme cuenta de todo lo que pasaba.
Sentada en uno de los sofás de la gran sala mientras Dom se encontraba en el antiguo estudio de su padre, pues le pedí un rato a solas, contemplé la inmensidad del lío en el que de una forma u otra estaba metida y, por alguna razón, aún sabiendo que mi prometido había matado personas, amigos de mi abuelo, y que de seguro acabó con las vidas de muchos más antes de conocerme, eso no fue mi principal preocupación.
¿Lo que dijo Hannah aquella vez tenía que ver, sobre pensar en su esposo como un soldado que hacía el bien?
Desde el lado de la moneda de Dominik, y el de casi todo el mundo me aventuraría a decir, incluso el mío, lo que él hacía era venganza, pero también justicia. No buscaba los focos, no buscaba la atención: había estado acabando con las personas que le quitaron a su familia sin ju