Capítulo 48
Laura y Vicente se miraron entre ellos, sorprendidos y asustados. Camila seguía parada frente a ellos, sin decir una palabra.
—Camila… por favor —dijo Laura, bajándose de las piernas de Vicente y arreglándose la ropa—. No digas nada, Vamos a hablar con Luciano. Solo que… no ahora.
—No es el momento —añadió Vicente—. Ha estado alterado, lleno de cosa, Necesitamos un par de semanas.
Camila los miró, se dio cuenta de inmediato que ellos se querian
—Yo no voy a mentir por ustedes —dijo finalmente—, pero tampoco voy a delatarlos. Solo… sean discretos. No se expongan así.
—Lo seremos —prometió Laura, aliviada.
—Gracias —dijo Vicente, abrazándola—. No sabes lo que significa para nosotros.
Laura se unió al abrazo, y Camila suspiró ella apoyaría el amor
Horas más tarde, fue a visitar a Susan, La recibió con un abrazo fuerte y la hizo pasar al departamento.
—¿Qué pasó? —preguntó Susan.
—Necesitaba hablar con alguien que no me mire como la esposa de un mafioso.
—¿Y si te miro de esa