—Me identifico con esta canción en este momento porque es para una persona muy especial para mí, ella es bellísima y yo un idiota, quiero que sepa lo mal que me siento por haberla dejado ir.
Él me mira, aunque el público está al frente, eso parece no importarle. Sus dedos comienzan a deslizarse suavemente por las cuerdas de la guitarra, escuchándose un sonido muy lindo.
—No sé muy bien, por dónde vas, Te buscaré, Estoy seguro que te encontraré, Estés donde estés… —Entona la canción “Ando buscando” de Carlos Baute y piso 21.
Al terminar, Alessandro recibe muchos aplausos, yo estaba muy feliz por él y él me veía solo a mí que más le gustaba era el de Sam. Sofía abraza a Alessandro y lo felicita, borrándome una sonrisa y me giro para no verlos.
Entro a la habitación y me siento en la cama, entrelazo mis dedos entre si y juego con ellos impacientemente, escucho la puerta cerrarse y me da un susto, haciendo que sobresalte y me fije en él.
—Me asustaste. —Doy media sonrisa.
—Lo siento, tú t