Capítulo 50: Colapso y desconfianza.
Sentí la bilis subir por mi garganta, pero traté lo posible de disimular.
«Necesitaba salir del estudio, no podía permitir que me viera desfallecer»
Me miró extrañado cuando caminé en dirección a la salida. Supongo que el hecho de no continuar la discusión lo desconcertaba. Hasta yo quería seguir discutiendo, pero sabía que si esperaba un poco más, terminaría colapsando en su presencia.
Y no podía permitirme eso.
Respiré profundo, sintiendo un sudor frío bañar mi cuerpo.
El dolor me dobló en dos justo cuando estaba a un paso de escapar por completo. Caí contra el marco de la puerta, jadeando, mientras el fuego en mi abdomen se extendía hasta paralizarme los pulmones.
Frederick estaba junto a mí en un parpadeo. Su gesto de enfado adornaba su rostro.
—Estúpida —murmuró con la rabia latente en su voz.
—Estoy bien —dije con prisa, jadeando. Sabía que él no me creía, ni siquiera yo me lo creía.
Soltando algunos improperios, pasó sus manos por mi espalda y la parte posterior de mis