16• Por favor, despierta.
El silencio entre ellos se volvió insoportable. Yo no podía dejar de mirar a Dean, preguntándome por qué había dicho eso. ¿Por qué mencionar a Celine frente a su hermano? ¿Y por qué Daryl había reaccionado de esa forma, como si el simple hecho de oír su nombre lo hubiese golpeado directamente en el pecho?
—No puede ser —dijo al fin, con un tono tan bajo que casi sonó para sí mismo—. Ella no puede ser la amiga de Celine.
Mi corazón dio un salto.
—¿Por qué dices eso? —pregunté, sin poder ocultar la confusión—. Soy su mejor amiga.
Daryl me observó, incrédulo, luego se pasó una mano por la cara y comenzó a caminar de un lado a otro. Yo solo podía escuchar mi respiración, rápida, descontrolada, mientras intentaba encontrar una explicación lógica a su reacción.
Finalmente, se detuvo. Y cuando volvió a mirarme, había algo distinto en su mirada… algo parecido a lástima.
—No puedes ser su amiga —dijo despacio, como si cada palabra le costara pronunciarla—, porque su amiga está muerta.
La habit