Capítulo 2.

Levi: 

Momentos antes: 

Iba a reunirme con el consejo ya que ellos tenían algo importante que decirme, no estaba de humor para reunirme con nadie ahora, así que no tengo más remedio que hacerlo. 

Al entrar todo estaban reunidos, yo camine hacia la cabecera de la mesa para sentarme. Odiaba reunirme con ellos, ya que siempre están insistiendo en que debo tener una esposa, ya que es importante que la nación de Austria, debe tener una reina cuanto antes. 

Mi padre murió y yo tomé el cargo como Rey de Austria a penas murió, mi madre, está en la cárcel por haber sido cómplice del secuestro de mi hermana, eso se cataloga como traición, honestamente ella me daba igual, puesto que por su culpa, Hayley la pasó muy mal estando cautiva por muchos meses, que incluso tuvo a su bebé en ese lugar. 

El consejo de Austria es uno de los más complicados en cuestión de la Realeza, ellos son mas exigentes, más duros con respecto a la corona, la reputación de Austria depende de mi y de ellos. Mi país es rico en muchos aspectos y si algo sale mal, los aliados pueden abandonarnos y la economía podría decaer. 

—Su alteza, se que lo le gusta reunirse con nosotros pero, esto es de suma importancia. 

—Los escucho. 

—Nos ha llegado una información sumamente preocupante. 

El hizo una seña, luego fue puesto un sobre frente a mi, yo lo abrí sin mucha prisa, mi ceño se frunce duramente cuando veo que son unas fotos. No son fotos cualquiera, eran mias, entrando a la habitacion de Anna, luego de otras saliendo de la misma, incluso, había una en donde yo estaba besandome con ella por el pasillo del palacio, en esa foto yo estaba tocándola.

Maldita sea. 

—¿De donde sacaron todo esto?

—La información fue anónima así que no lo sabemos —respondió uno de ellos—, ¿entiende la gravedad de esto, su majestad?

Claro que entiendo lo grave que es esto, estoy completamente jodido. 

—Su proceso de duelo fue hace mucho y lamentamos que haya perdido a su prometida y a sus hijos, pero ya no debe seguir esperando... Teníamos un prospecto para usted, pero esto fue divulgado a la prensa. 

—¿La prensa sabe esto?

—Si su majestad, la prensa sabe que usted tiene una amante y su sirvienta. 

Esto se esta poniendo cada vez peor. 

—La solución más viable es que se case con ella. 

—¿Me estan jodiendo, no? —negué— No pienso casarme con ella, ni con nadie. 

—Su majestad, entienda que esto es grave, usted tenía la reputación de ser un hombre intachable, ahora que todos saben que tiene una amante, todo se podría complicar, la nación correría riesgo y usted, podría ser destituido de su cargo como Rey. 

Hayley podría reclamar la corona, pero ella no quiere hacerlo. Después de mi, hay más sucesores, pero ninguno de ellos está preparado para esto.

Maldita sea. 

No quiero casarme, mucho menos con Anna, yo no puedo hacerle esto a Cassandra, ella es el amor de mi vida, no puedo hacerlo. 

—No tiene de otra su majestad, debe casarse con ella. 

—Puede ser durante un año y medio, para que las especulaciones bajen, si quiere, después puede divorciarse, pero debe tener un heredero. 

—¿Que les hace creer que tendré un heredero con esa mujer?

—Es la única manera que no sea destituido de su cargo, debe seguir las reglas su majestad, o lo hace o pierde la corona. 

Maldita sea, no quiero casarme, no quiero hacerlo, mucho menos con una mujer que no amo. Pero si no lo hago corro el riesgo de perder la corona, mi padre puede que haya sido un bastardo, pero luchó demasiado para mantener la corona en lo más alto de la realeza.

—Esta bien, voy a casarme, pero estaré solamente un año con ella, si en ese tiempo no consigo un heredero, me divorcio. 

Malditas leyes de m****a.

—Muy bien su majestad, comenzaremos con los preparativos. 

—Pero eso si, debe anunciar que se casará, que se ha dado una oportunidad en el amor, para que nadie, lo ataque ni lo cuestione. 

—Tendremos que hablar con la chica, prepararla ya que ella no pertenece a la realeza, lo dejaremos pasar, ya que no queremos más conflictos en estos momentos. 

Me puse de pie y tome aquellas fotos para salir de la sala de reuniones, estaba realmente molesto con todo esto. Es obvio que fue ella quien difundió esta información, anoche ella me lo recriminó, es obvio que lo hizo para joderme, solo porque no le ofrecí algo más. 

Salí del lugar sumamente molesto. 

Ahora tendría que casarme con ella, pero todo esto es mi culpa, por haberme dejado llevar por la calentura, por no dejarme la verga en los pantalones. Tenía que resistirme, negarme a todo lo que estaba por suceder, aun asi, me acosté con ella, me metí entre sus piernas y fue difícil salir de ahí.

Estoy completamente jodido. 

(...)

—Fuiste tu, ¿verdad?

—¿D-De qué habla su..?

—¡Tu le dijiste a los medios que somos amantes! —alce la voz.

Ella retrocedió ante mis palabras, incluso jadeaba. 

—No, le juro que yo no lo hice —ella negó—, recién estoy saliendo de mi habitación su majes..

—¡Calla! ¡Cállate! —alcé de nuevo la voz.

—Basta Levi, la asustas.

Me aleje de ellos y me recargue en la mesa, estaba realmente molesto por todo esto, estoy jodido- 

—El maldito consejo quiere que me case —murmure—, quiere que me case contigo —la mire—, porque se han enterado que somos amantes. 

Ella comenzó a negar muchas veces.

—Le juro que yo no lo hice —dijo, se veía asustada—, se lo juro. 

—Déjame solo con ella Frederick.

—Levi, no..

—No quiero repetirlo. 

Frederick no tuvo más remedio que salir de mi despacho, yo cerré la puerta con fuerza, luego me acerque a ella. 

—Vas a casarte conmigo —le dije—, eso es algo que no está en discusión.

—P-Pero..

—No hay peros Anna, vamos a casarnos, te guste o no... Mi puesto como Rey está en juego y no puedo perder mi corona. 

—Yo no tengo la culpa de eso Levi, yo no hable con nadie... Lo juro..

—No me importa, me importa una m****a lo que digas, vas a casarte conmigo, es mi última palabra.

—No puedes obligarme a hacer algo como eso...

—Si puedo, soy el Rey, tu Rey y mi palabra se hace —masculle—, ¿No querias algo mas? Te lo estoy dando... Ahora serás mi esposa, tú harás lo que diga y eso no se va a discutir, ahora largo, más tarde enviaré a alguien para que te comience a preparar, largo. 

Ella se quedó quieta un momento, luego salió. 

Ahora tengo que lidiar con otro problema más. 

No quería ni quiero casarme, yo sigo amando a Cassandra, a pesar de que ella no está en este mundo, sigo amandola. Ella ha sido la única mujer a la que ame de verdad, pero la vida se encargó de llevársela de mi lado. 

Se fue hace dos años junto con mis hijos, aun su recuerdo sigue latente. Mi pecho duele al recordar la urna de ella y las de mis hijos, a diario me preguntaba ¿que demonios hice mal? No merecia todo este sufrimiento, ella no debía irse de mi lado. 

Me arrepiento tanto no haberme casado con ella antes, pero queríamos esperar que nacieran nuestros hijos para que la boda fuese mucho más llevadera, pero no, la vida me castigo de la peor manera, llevandoselos a los tres. 

Ahora tengo que desposar a otra mujer que no es ella, a una mujer que no amo en lo absoluto, que solo calienta mi cama, pero es mi culpa, solo eso, mi culpa. 

No me queda más remedio que casarme con Anna. 

(...)

Más tarde: 

Pase toda la tarde mirando las noticias, no hacían más que hablar de mi amorío con Anna, tuve que colocar en mis redes que me había enamorado de nuevo y que quería volverlo a intentar, no estaba de humor como para tener que lidiar con la prensa en este momento. 

Ya los preparativos comenzaron, en un día o quizá dos, estare casandome con ella. 

—Levi, Julia está aquí —me anunció Frederick. 

—Hazla pasar. 

La mujer entró a mi despacho, como siempre luciendo extremadamente elegante. Se acerco a mi para abrazarme. 

—Hola querido. 

—Julia. 

—Supe lo que sucedió en las noticias, en serio lo lamento. 

—No lo lamentes, no es más que mi culpa. 

—La chica tampoco la tiene —la mire mal—, no me mires así, sabes muy bien que ella no tiene la culpa, más bien quizá fue alguien dentro del palacio que los expuso. 

—Me da igual, ya lo hecho, hecho está. 

—Como digas, si estoy es para alistar a la chica, ¿no?

—Si, quiero que le enseñes etiqueta y todas esas mierdas —dije entre dientes—, quiero que al menos parezca una mujer de etiqueta. 

—Esta bien, mandaré a buscar mis cosas y hablaré con algunos asesores. 

—No, no quiero a nadie más metido en esto, quiero que te encargues tu, nadie más. 

—Bien, iré a verla, ¿dónde está?

—No se, pregúntale a Frederick. 

—Dios Levi, al menos disimula que la odias —ella dijo molesta.

—No puedo evitar odiarla. 

—Eso no lo pensabas cuanso te la cogias —alzó una ceja—, así que deja ese odio atrás, iré a verla y veré que puedo hacer. 

Ella se retiró de mi despacho. Yo camine hacia la mesa en donde tengo las botellas, me serví un trago para comenzar a beber. Esto era lo único que me aliviaba, beber hasta el cansancio hasta embriagarme. 

Cada dia que pasaba, extrañaba a Cass, extrañaba sus ojos, su sonrisa, su cabello, su aroma. Todo. Siempre me encargaba de mantener su memoria viva dentro del palacio, pero a medida que pasaban los días, todos aquellos recuerdos se hacían más lejanos. 

Todas sus cosas están guardadas, porque me aconsejaron guardarlas para que el duelo fuese más llevadero, todas sus pertenencias están guardadas en una habitación, justo al lado de la mía, dentro de ella estaban las cosas de mis hijos, unos a los cuales jamás llegue a conocer. 

Pense que seria fuerte, pero no, no lo soy, soy un maldito debilucho que no sabe como afrontar las cosas con valentía, pero la amaba tanto, que me es difícil poder continuar con mi vida. 

¿Como lo haría? ¿Como se supone que deba hacerlo? 

Si cada vez que pensaba en ella, el pecho me dolía y mi tristeza iba en aumento, ella era el amor de mi vida, la mujer que más he amado en la vida, ninguna otra mujer podrá ocupar su lugar. 

Ninguna. 

(...)

Al dia siguiente: 

En dos días me casaba, ya el consejo dio una fecha, mientras más rápido sea esto, mejor. 

Entre a la habitación en donde estaban las cosas de Cass, lo primero que me recibió fue su enorme cuadro, aquel que mande a pintar cuando ella cumplio años, luego dos dias despues me entere que seria padre. 

—Hola linda —le hable al cuadro—, me casare, te juro que no quería que esto sucediera así, no amo a nadie más que no seas tu, se que me odias porque me acostaba con ella... No se que paso conmigo, pero te juro que jamás volveré a tocarla, ya no lo haré —murmuré—, sabes que no amo a nadie más que no seas tu, pero si no me caso, todo el esfuerzo de la corona pasara a otra persona,.. De verdad lo siento linda, espero que me perdones. 

Estaba sintiendo rabia en este momento, una rabia que ni yo mismo se explicar, odiaba con todo mi ser tener que casarme con ella, no quiero hacerlo, no quiero casarme, pero si no lo hago, todo este reino se va a ir a la m****a.

Tendré que fingir ante los demás que estoy enamorado de Anna, no me queda de otra. Cuando sea el momento, me divorciaré de ella, le daré una compensación para que se vaya lejos de aqui, es lo mejor que puedo hacer. 

En este momento no puedo pensar en nada, más que la corona y el país, todo depende de mi ahora. No puedo dejar que todo se vaya a la m****a asi como asi.

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