Anna:
No quitaba la mirada del televisor, estaba viendo el programa de chismes o más bien uno de los programas de chismes del País, de los muchos que han hablado pestes de mi, ellos estaban pidiendo disculpas públicamente, unas disculpas hacia mi, que no se escucharon sinceras, pero al menos lo están haciendo.
Las revistas, los medios de comunicación, la radio y todo ello, habían ofrecido disculpas por haber hablado o inventado cosas sobre mi, aquello me hizo sentir bien, mas no del todo porque ninguna de esas disculpas fueron sinceras. Todo lo hicieron por presión seguramente.
Pero estaba aliviada de que ellos dejarían de hablar mal de mi.
Aunque eso no quita todo lo que dieron, porque de verdad fueron palabras realmente hirientes. Cada artículo que sacaban era peor que el anterior, decían cosas de mi que no eran ciertas, daban datos totalmente erróneos y hablaban como si ellos me conocieran, realmente estaba harta de esto, harta de que las personas comentaran algo sobre mi, cosas que no eran ciertas.
Al fin las cosas estaban tomando su lugar.
Como debio ser desde un inicio.
—Ya veo que te enteraste —miré a Levi, el entro a la habitación.
—Si, justo acaban de terminar de hablar.. No pensé que ellos harían eso.
—Porque los obligue a hacerlo.
—¿Qué? ¿Hablas en serio, Levi?
—Lo que escuchaste mi amor —se acercó a mi y rodeó su brazo en mi cintura—, mande algunas cartas exigiendo todas esas disculpas, quiero que comiencen a respetarte y darte el trato que mereces, como mi esposa y como persona.
Me dio un beso en la mejilla.
Vaya que hablaba muy en serio con arreglar esto, me alegra que los haya presionado, no soy una persona mala, pero no quiero que sigan hablando de mi como si me conocieran, quiero que me respeten, es lo único que pido.
—No hablaran más de ti, al menos no cosas venenosas, me encargue de ello.
—Gracias por hacer esto.
—No hay de que, dije que lo arreglaría y eso estoy haciendo —sonrió—, por cierto, las cosas pasaran a mi habitación cuanto antes, quiero que duermas conmigo esta noche.
—Está bien.
Nuestra relación ha progresado bastante bien, eso me alivia mucho a decir verdad, me gusta el trato que me está dando, lo importante de esto es el respeto y el lugar que el me esta dando, quiero que confie en mi, para así, poder confiar en el, quiero confiar en el del todo, para que podamos seguir así, como la pareja que debimos ser.
A veces me comporto como una egoísta pero lo quiero para mi, quiero que me ame, quiero me de todo el amor solo a mi, porque he esperado eso desde que éramos amantes, quizá pida demasiado, pero es lo que quiero.
Ahora está dando un enorme cambio y me gusta, de verdad me gusta todo lo que ha progresado en todo este tiempo, me gusta lo mucho que ha cambiado y lo adulto que es al asumir sus errores. Está volviendo a ser el Levi que conocí, el que siempre fue bueno y justo.
Lo que le pasó es triste, eso lo hizo cambiar considerablemente volviéndolo un hombre completamente diferente, pero ahora se que esta haciendo un enorme esfuerzo por cambiar, por volver a ser el hombre que era antes. Del cual siempre he estado enamorada.
—Quiero que vayamos de paseo.
—¿Si? ¿A donde?
—No se, sigo pensando... Pero dejaré que escojas el sitio, quiero llevarte a algún lugar hermoso, tu solo dime y yo me encargo de todo.
—Eso me gusta, tengo muchos sitios a los que me encantaría conocer, muchos países... Ya que cuando era sirvienta no podía hacerlo.
—Anna ¿seguirás llamándote así? Sirvienta.
—Siempre lo fui, yo era una sirvienta y no me avergüenza haberlo sido.
—No digo que te avergüence pero, en la forma en que lo dices, como si eso jamás te hubiese gustado.
—¿A quien le gusta ser sirviente? —reí— A nadie, Levi... Por muchos años se me dejó en claro mi lugar dentro de estas paredes, me han dicho que seré sirvienta hasta el dia en que muera, pero todo dio un giro inesperado entre nosotros, pero las personas seguirán llamándome así, una sirvienta.
A pesar de ser la esposa de un Rey, yo no pertenezco a la realeza, soy una plebeya, una sirvienta y nada cambiara eso. Por años su madre se encargó de dejarme en claro que no tendría una oportunidad con el, porque era eso, una simple sirvienta.
Cassandra era una mujer sencilla, pero ella poseía riquezas porque era hija de un importante empresario, por eso su madre no se entrometía, porque ella estaba a la altura de Levi.
En cambio yo, no soy más que eso, una mujer que ha servido a la realeza desde que nació, así como lo hacía mi madre, ella trabajó para el Rey durante toda su vida, incluso hasta morir, así que no quería irme, porque una parte de mi, quería seguir al lado de Levi, así que solo me quedaba seguir los pasos de ella, porque no tenía los medios para irme de aquí. No conozco nada más que estas paredes.
—Lo se, pero nadie merece esos tratos, mucho menos tu, que has sido buena persona desde siempre —acaricio mi mejilla—, por ello, les dejaré en claro a todo el mundo que eres mi esposa, que deben respetarte, como ser humano y como mi Reina consorte, ¿bien?
—Esta bien.
—Entonces —sonrió y me pego a su cuerpo aún más— ¿A donde quieres ir?
—Quisiera poder viajar Alemania, se que no es lejos pero quisiera conocer un poco más a tu hermana —le propuse—, ya sabes..
—Me parece buena idea —asintió—, le diré que iremos, luego escoge a donde quieres ir, yo me encargare.
—Esta bien —sonreí un poco.
El me dio un corto beso, la verdad es que me encanta como estamos llevando esta relación, se que no tuvimos el mejor comienzo pero estamos haciendo un esfuerzo.
—Oye, saldremos esta noche.
—¿Ah, si? ¿A dónde iremos?
—A una cena, es de política, no tengo nada que ver ahí pero me invitaron y no quise rechazarla.
—Entiendo, ¿Por que Molly no me dijo?
—Preferí decirtelo yo, así que ponte hermosa esta noche, quiero que la pasemos bien en esa cena, me muero por bailar contigo.
—Claro.
(...)
Más tarde:
La cena sería en un lugar importante de Austria, Levi debía ir porque es el Rey ya que el no esta del todo metido en la política ya que para el son cosas de peleas que jamás acaban, el se ha encargado de mantener el pais con cero corrupcion, pero asi no le guste la política, debe estar inmerso en ella, ya que el, es el mayor gobernante de este pais.
Yo por otro lado, he pensado en la idea de estudiar, de poder graduarme y hacer con mi vida, no solamente ser la esposa de Levi, si no una esposa digna de estar a su lado, Molly me dijo que puedo obtener clases en linea para poder obtener mi titulo de primaria y secundaria.
No pude estudiar porque mi mama me tuvo con ella durante toda su vida, ella cuando tenía algo de tiempo me enseñaba a leer y escribir, aunque fuese para defenderme, pero jamás me dejó ir a la escuela, cosa que jamas entendi.
Yo quería ir a la escuela, tener amigos, salir con ellos y esas cosas, pero mi mamá jamás lo permitió, decía que quería cuidarme, lo que jamás entendí fue el porqué o de quien quería cuidarme. De igual manera no la odio por eso, estuvo a mi lado hasta que falleció, quizá si ella me hubiese dado unos estudios, yo estaría lejos de aquí y mi historia sería otra.
Pero bueno, el pasado no puede cambiarse.
Pero si el futuro, o al menos eso esperaba.
Quisiera tener un título aunque sea, siempre quise ser maestra para los pequeños, pero jamás se pudo.
—Anna ¿estas..?
Levi entró al closet de la habitación, se quedó mirándome por un momento, aquello me hizo sentir un poco nerviosa.
—Estas preciosa —me dijo—, definitivamente los vestidos son lo tuyo.
—¿Tu crees? —mire mi vestido— Es que siento que estoy siendo repetitiva con los vestidos.
—Para nada —se acercó a mi—, creo que es una marca muy auténtica tuya —me sonrió—, los vestidos lucen muy hermosos en ti.
—Gracias —susurré.
—Oye, tengo una duda —dejo de mirarme, yo frunci el ceño—, se que cuando comenzamos a ser amantes no me preocupaba por lo más mínimo de ti, solo de mi —sonaba avergonzado—, pero quisiera saber si te estas cuidando.
No creí que me preguntaría eso, pero lo aprecio mucho.
—Si, estoy cuidandome —me miró—, llevo tiempo tomando la píldora, soy bastante estricta con ello.
—Anna perdón por eso —se rasco la nuca—, de verdad, pero voy a remediarlo, iremos a un médico para que te recete algo adecuado si así te parece, es que..
Lo calle con un beso corto.
—Entiendo —reí—, así que no te preocupes, más tarde hablamos de ello en la cama —el asintió—, ahora vamonos ¿si? Debemos ser puntuales.
—Claro.
Ambos salimos del closet y fuimos hacia la salida, no me sentía cómoda saliendo por temas de política, pero mi deber como su esposa era acompañarlo, además sería injusto no acompañarlo, el se ha esforzado mucho por tratarme bien y darme mi lugar.
Levi abrió la puerta del auto para que yo subiera, luego el lo hizo, Frederick comenzó a desplegar la seguridad para ir hacia donde teníamos que ir,
Me dijo que sería cerca del palacio, yo solo miraba por la ventana del auto, Levi ha hecho todo lo posible para que el pais sea próspero, a pesar de que Austria no es un pais enorme, es rico en muchos aspectos y hay una buena economía, por eso es que el pais ha estado estable.
Habíamos llegado, por supuesto esperamos que la seguridad fuese desplegada, luego bajamos del auto, la prensa estaba afuera, muchas personas gritando para que los saludáramos, se que no es parte del protocolo pero lo hice, salude para después entrar con Levi al salon de eventos.
De inmediato nos recibieron muchas personas, conocía a algunos de los políticos presentes, también al presidente, que se encontraba aquí.
El lugar era básicamente como una cena, habían mesas y sillas por todos lados.
—Bienvenido, su majestad, señora Newt —me saludó—, por favor, síganme.
Seguimos al hombre hacia donde estaba nuestra mesa, que por cierto, era solo para nosotros dos, Levi mientras iba pasando, iba saludando a los presentes, la verdad es que no entiendo para que es esta cena pero no importa, Levi me dijo que estaremos aquí un momento nada mas, todo por protocolo.
—Levi —el me miró—, debo ir al baño —le susurré—, ¿donde está?
—Allá —me señaló el pasillo—, está al final del pasillo, si quieres...
—No, yo iré —le di un beso en la mejilla—, ya regreso.
Camine hacia el pasillo en donde me dijo que estaba el baño, yo lo encontre, asi me meti para solamente retocarme el maquillaje, el beso que le di a Levi hizo que se me corriera un poco el labial.
Cuando termine, me mire al espejo y tome mi bolso para salir del baño, al hacerlo me encontré con el presidente.
—Señora Newt.
—Presidente Neumann, ¿necesita algo?
—Si, quería hablar con usted.
—Claro pero, ¿podría ser en otro sitio? Es que aquí se vería un poco inapropiado.
Comencé a caminar hacia la reunión pero me detuve cuando lo escuche.
—¿Te parece inapropiado esto? —lo escuche reír, luego voltee a verlo—, ¿No te pareció inapropiado acostaste con Levi?
—¿Disculpe? ¿Por que me está diciendo esto?
—Porque siento curiosidad —comenzó a acercarse a mi, yo me quedé paralizada—, de como llegaste al palacio, de ser una simple sirvienta, luego la amante de Levi y ahora su esposa, eso es algo que a mi me causa demasiada curiosidad —miró mis pechos y luego a mi—, aunque viéndote bien.. Entiendo a Levi, yo estaria asi de loco por ti, has de ser bastante buena en la cama —rió— ¿lo comprobamos?
Mi mano se fue directamente a su mejilla, aquel enorme impulso de golpearlo llego a mi, no puedo creer que de la nada este hombre me diga estas cosas, creí que era un caballero, pero ahora veo que no.
Que decepción.
—Le exijo que me respete —mascullé—, usted no me conoce para hablar pestes de mi, ¿me escucho?
—Que fuerte ¿eh? —sonrió, su mano estaba acariciando su mejilla—, no eres más que una..
—Ni se te ocurra terminar la maldita frase —escuché a Levi detrás de mi.