CAPÍTULO 75

RONAN

La sostuve entre mis brazos mientras las lágrimas empapaban su rostro. Astrid temblaba, rota, con la mirada clavada en un punto invisible, como si todavía viera el eco del dolor, como si los gritos de su alma aún resonaran en las paredes del bosque.

—Voy a vengarlo, Astrid —le susurré con la voz rasgada, sintiendo la furia y la tristeza arder en mis venas como fuego líquido—. Voy a hacer que Magnus pague por cada gota de sangre… por nuestro hijo.

Sus ojos se cerraron con fuerza, y un sollozo la dobló por la mitad. Apreté mi abrazo, deseando ser suficiente para sostenerla en ese abismo que la había devorado.

—No pude... —susurró con la voz apenas audible—. No pude protegerlo, Ronan. ¡Era mi hijo! Y Elliot… Elliot murió por nada…

—No digas eso. No fue en vano —tomé su rostro entre mis manos y la obligué a mirarme—. Él te quitó la maldición… te dio a nuestro hijo. Y tú ya no eres infértil. Vamos a honrarlo, Astrid. Pero ahora necesitas descansar. Mañana, Magnus morirá. Lo juro.

Ell
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App