Mundo de ficçãoIniciar sessãoDesde que Kerana había llegado a la comunidad Rukawe, su mente se sentía como una caja vacía. Sin pasado, sin recuerdos, sin sentido de pertenencia. Solo un vacío que dolía.
Esa mañana había tenido su sesión de curación con Arasy y Mainumby. La matriarca y su hijo eran pacientes y gentiles, pero el proceso la dejaba exhausta. Arasy colocaba sus manos sobre su frente, murmurando antiguas palabras en el idioma de la manada, mientras Mainumby guiaba la energía con movimientos lentos y precisos.
Siempre terminaba igual: un zumbido en los oídos, la cabeza latiendo como un tambor, la vista nublada por momentos.
— Es normal







