El padre y los tíos, cuidan de las nenas.
El CEO Mendoza se quedó pensando, sus hijos también llevaban buena educación.
— Creo que por ahora no hay peros que les puedas poner a mis hijos, así que considero que pueden visitar a tus gemelas. Si cuando crezcan no son dignos de las señoritas que vas a criar, yo mismo estaré de acuerdo contigo en que se alejen.
— Hmm... Ya veremos, saluda a Emma de nuestra parte, Angelic todavía no puede levantarse de la cama, de no ser así ya estaríamos en el hospital visitándola.
— Lo sé, pero mientras puedas cuidar a mis hijos por mi, estaré más tranquilo, no quiero que se sientan solos en la villa, la compañía de Vladimir les va a hacer bien.
Ellos se están preparando para hacer pijamada. Se adaptan rápido, además que son muy desenvueltos, de vez en vez vienen a la habitación de las nenas para echarles un vistazo.
— Es curiosidad, eso es todo, los bebés recién nacidos siempre suelen llamar la atención.
— Hmm... Los estaré vigilando, entonces... ¿Ya tienes nombre para las trilli