El día de la boda.
Angela se llevó las manos a los labios, no se esperaba esa pedida de mano de Emiliano esa tarde, pero le emocionaba muchísimo.
— ¡Demonio Mendoza, tú lo que quieres es robarme a mi hija, ella vive muy cómoda aquí con nosotros!
El CEO Darkok casi se infarta. Le costaba mucho dejar ir a su princesa.
— Cálmate cariño, debes entender que Emiliano y Angela están esperando a su bebé, ellos deben ya de ir formando su hogar, preparar las cosas que el bebé va a necesitar, eso es lo más normal.
— Angelic, no te pongas de parte de este ladrón de hijas, además ¿Con que tiempo va a cuidar este demonio a Angela, si se la pasa trabajando?
— Tío Dimitrir, ya lo he hablado con mi padre, él quedó en echarnos una mano en la compañía para que yo pueda pasar más tiempo con mi futura esposa. Cuidaré bien de ella, no tienes nada de que preocuparte.
— Deja de ponerte en ese plan Dimitrir, en todo caso también me negaré a que Rafaela se case con Valdimir.
El CEO Rafael Mendoza llegaba a l