Pocas veces se había visto tan furioso al CEO Lucano Black, poco faltó para que le saltará encima a su yerno y le diera una paliza.

— Lucano mi amor, nuestra hija me ha llamado para darme una maravillosa noticia... Oh, disculpen, no sabía que estabas ocupado cariño.

— Para ti nunca estoy lo suficientemente ocupado, cielo, pasa, este asunto nos compete a todos, sé lo que la nena te dijo, ella... Nos va a hacer abuelos, ¿Es eso lo que venías a contarme, cierto?

— Carajo, ¿Cómo haces para saberlo todo? Yo que quería darte una sorpresa, eres imposible Lucano, ¿Acaso nos vigilas todo el tiempo y es por eso que siempre sabes lo que hacemos? Responde, ¿Te has atrevido a vigilarnos a nuestra hija y a mi? — La señora Black estaba algo molesta.

— Por supuesto que no haría tal cosa, ¿Por quien me tomas, querida? Estos dos caballeros se te han adelantado y me han dado la noticia primero.

— Doménico... Señor Lombardi, que sorpresa tenerlo por aquí, ¿Qué le parece la noticia de que s