Un joven, cargaba cierta cantidad de periódicos, y panfletos, detrás de él, un hombre alto y delgado, muy bien vestid de traje, era blanca y de ojos negros, llevaba un sombrero negro, y fumaba un puro, Jean-Paul, enviado especial de la Gazette,

que se aburría en sus viajes de París hasta el condado de Gevuadan, donde casi nunca ocurría nada, jean-Paul se detuvo antes de llegar a la plaza de la ciudad, su mirada aburrida se perdió en las altas colinas de la ciudad, a jean-Paul no le causaba ninguna impresión el lugar.

El joven comenzó a pegar algunos panfletos en los muros del parque, Una que otra carroza bien adornada pasaba por las calles empedradas de la ciudad, la niebla matutina obligaba a los faroleros de la ciudad, a mantener las lámparas encendidas hasta grande parte de la mañana.

El joven colocó el último panfleto, comenzó a gritar delante, los presentes que estaba en el parque:

¡La Gazette! ¡La Gazette! El periódico de París, el rey Luis XVI, Francia, refuerza el derecho divi