Jenn: 

Le daba las últimas indicaciones a los chicos de edición para el periódico de mañana, los de economía nos han dicho que el periódico se ubicó entre los cinco mejores periódicos del estado que ha tenido ventas masivas, todo gracias al arduo trabajo de todos. 

Me sentía tan bien de que ahora mi trabajo fuera recompensado de esta manera, todo se lo debo a mi mejor amiga, por haber hablado con ellos para que se me diera un trato justo. 

—¿Alguna idea para la pagina de farandula? —pregunte, solté un suspiro cuando vi a Hanna alzar la mano. 

Que ella esté aquí, es realmente molesto por que fue la unica condicion de que el periódico fuese a manos de mis hombres, el señor Moore les pidió que ella se quedara trabajando, debo decir que es una completa inutil, no sabe hacer nada, solamente buscar información de moda, farándula entre otras cosas. Es para lo único que sirve. 

—Dime Hanna. 

—Esta semana salieron los nominados a los premios de Oro, también lo último en tendencia en modas... Más rumores de citas, entre otras  cosas, hice una lista de ello. 

Extendí mi mano hacia ella, me entregó el papel que tenía la información, fruncí el ceño al leer algo sobre Dak Ho, adjuntando una foto, era el saliendo de su empresa con una mujer que supongo que es de su misma nacionalidad, luego otras de el abriéndole la puerta del auto.

—El jefe Kang se lo tenía bien guardadito ¿no? —dijo ella con burla—, está comprometido. 

—¿De que hablas? —pregunto Mia. 

—Pues el jefe está comprometido con una mujer llamada Jeon Areum —mire a Hanna—, se conocen desde hace un tiempo, ella vino desde Corea para estar con el. 

Decidí no decir nada, ya despues hablare con Dak Ho para que me lo explique. 

—Si no es una noticia confirmada, no se publicará. 

—¿Que? ¿Sabes cuánto me esforcé por encontrar la noticia? 

—¿Ah si? ¿La hiciste tu o contrataste a un periodista? Por que era tu método antes —deje los papeles con brusquedad en la mesa y me crucé de brazos. 

Ella no respondio dandome a entender que si lo hizo, creo que me estoy poniendo celosa por ver esas fotos, solo debo calmarme, no soy como ella que le encantaba humillar a las personas, yo no soy así. 

—Si no esta confirmado, no se publicará, hacemos noticias serias. No somos una revista amarillista, sigamos con lo pautado. 

Seguí haciendo mi trabajo, tenía que calmarme un poco, no hacer suposiciones tontas y dejar que hable. Pero me da rabia de pensar que ella puede tocarlo, joder tengo que calmarme. 

(...)

Estaba en la oficina terminando de redactar la columna de mañana, pensé que olvidaría el tema de las fotos de Dak Ho pero las redes sociales se encargaron de esparcir el rumor de que el está saliendo con una chica y que posiblemente esté comprometido. 

Dak Ho es una figura pública y aunque no sea la más reconocida, si tiene su fama, como el sexy, apuesto hombre de negocios que es. No es la noticia del momento, pero si es la mas popular. La mujer que esta con el llevaba un elegante vestido negro que se acentuaba a figura y tenia un rostro pulcro y perfecto. Se ve perfecta para el. 

Tengo que admitirlo, ella es bonita. 

No puedo sentirme insegura por ello, yo soy hermosa y jamas me sentido inferior a ninguna mujer, creo que soy lo suficientemente mujer para el incluso para cualquier hombre. 

¿No? 

Aunque tengo que estar preparado para lo que se viene despues...  Ya mis padres aceptaron mi relacion con ellos, ahora falta que todo el mundo lo sepa, no se como se lo vayan a tomar, pero debo mentalizarme desde ya que los comentarios hacia mi no pueden afectarme, ya que la sociedad sacrifica a las mujeres por querer ser un poco liberales, que es en mi caso. 

Tengo que ser fuerte para lo que viene, eso incluye a la familia de Dak Ho, temo por el, por que no se como se vayan a tomar la noticia de que el está compartiéndome con otro hombre y le digan que yo soy la culpable de eso. 

No quiero que este mal por mi culpa o tenga problemas. 

Dios, pensé que esto sería más sencillo, pero que errada estaba. 

No puedo quedarme con la duda.. 

Tome mi bolso y mi abrigo para salir de mi oficina, iré a la empresa de Dak Ho para que me lo explique, no puedo quedarme con esta duda de saber quien es esa mujer. 

Sali del periódico y tome el autobús rumbo a la parada más cercana de su empresa, ahora que tengo un buen empleo, tengo que comprarme un auto asi sea usado, eso de estar en bus es estresante por que siempre están llenos, el metro es peor. 

Pague mi asiento del bus y baje del mismo, por suerte estaba cerca, pude ir caminando pero hace demasiado frio como para estar yendo a pie. 

Entre a la empresa y me recibio la tecnología, debo admitirlo, esto es impresionante. Me acerque a la chica de la recepción. 

—Buenas tardes señorita, bienvenida a Empresas Kang ¿en que la puedo ayudar? 

—Hola —le sonreí—, soy del periódico Daily Notes —le mostré mi credencial—, vengo a ver al señor Kang. 

—¿Tiene cita? 

—Ah no... Es que quería hacerle una entrevista, pero no me dijeron lo de la cita. 

—Oh que pena señorita, llamaré al señor Park ¿como es su nombre?

—Jenn Foster. 

Ella tomo el teléfono de la recepción e hizo la llamada —Bag seonsaengnim? boseuleul chajneun yeojaga issneunde... ileum-eun jen poseuteo (¿Señor Park? Hay una señorita que está buscando al jefe... Se llama Jenn Foster) 

Era la primera vez que escuchaba a una americana hablar Coreano tan fluido, estoy impresionada. 

—mullon-ijyo seonsaengnim (Claro que si señor) —colgó el teléfono—, el señor Park vendrá en un momento a recibirla señorita, tenga. 

—Que amable —recibi el pase de visitante. 

Me coloque el pase en el cuello y espere en la recepción, por la entrada de la empresa, ingreso aquella mujer, vistiendo un abrigo largo con suma elegancia, luego ella se detuvo al ver al señor Park, quien me miro y sonrio un poco. 

La mujer volteó hacia mí, su mirada era despectiva. Aun así, no me deje intimidar. El señor Park se acercó a mi e hizo una reverencia. 

—Señor Park, no haga eso, mejor estreche mi mano —la extendi. 

—Lo siento señorita, es la costumbre —estrecho mi mano— ¿espero mucho?

—Para nada, llegué hace poco. 

—El señor Kang en este momento está en una conferencia, no sabe que usted está aquí —sonrió un poco—, se desocupara en poco tiempo ¿no le molesta esperar?

—Para nada, tengo tiempo. 

—Geuligo geu salam-i nawa gyohwanhan yeojaga issneunde, jeongmal hansimhaeyo. (Entonces esta la perra por la que el me cambió, que patetico.) 

La mujer me miró de arriba abajo, me sonreía con burla y como si yo fuese lo más insignificante del mundo. Yo no le baje la mirada. 

—Aleumssi jongyeonghabnida gangssi yeojachingu-inde geuleohge buleumyeon keun-ilnabnida. (Señorita Areum, respétela, ella es la novia del señor Kang, si la llama de ese modo, estará en problemas) —el señor Park se notaba incómodo o quizá molesto. 

Seguramente ella me está insultando. 

—Chimmug, yeoggyeoun jig-won... naega i modeun geos-ui anaeija ju-in-i doel geos-ida. geunyeoneun hachanh-eun nyeon-e jinaji anhneunda. (Silencio, empleado asqueroso.. Yo seré la esposa y dueña de todo esto, ella no es mas que una zorra insignificante.) 

—Señor Park ¿me lleva a la oficina de Dak Ho? —el asintió—, pero antes, hágame un pequeño favor. 

—Con gusto señorita. 

—Tenga —le di un billete de veinte dólares—, es para que vaya a la cafetería del frente y compre unos cafés y panecillos de vainilla, comprese un café para usted, yo lo invito. 

—¿Segura señorita?

—Vaya, yo lo esperare aqui. 

El hombre un poco inseguro asintió y se fue, yo me senté en la silla de la recepción a esperarlo, no pensaba seguirle el juego a la mujer frente a mi. 

—¿Que haces aqui? 

—Oh, hablas ingles —sonreí—, pues vine a ver mi novio, no se si lo conoces, pero se llama Dak Ho. 

—No seas estúpida —alzó una de sus perfectas cejas— ¿tu? ¿La novia de Dak Ho? No me hagas reír querida, el no estaria con alguien tan... Simple como tu. 

—Uy querida —me puse de pie—, tu no me conoces y creeme que no te gustaria hacerlo, asi que te pido, no, te exigo que me respetes ¿está claro? 

—Se nota que eres demasiado corriente querida, Dak Ho está por muy fuera de tus estándares... Mi hombre es alguien importante ¿sabes? Alguien de mundo, tiene que presumir a una joya como yo. 

Vaya que esta mujer tiene el autoestima hasta las nubes, siento pena por ella. 

—¿Tu hombre?

—Dak Ho y yo estamos comprometidos —mostró su mano, en donde estaba un hermoso anillo—, ya no es necesario que mujeres como tu y de tu clase, estén rondándolo como moscas a un dulce... 

No dejaba de mirar el anillo en su dedo, ella sonreía con total victoria, cosa que me molesto. Pero es mejor no decir nada más, el anillo en su dedo demostraba lo que me decía. Estaba comprometida con el o eso creía. 

—Que extraño, está "comprometido" —hice comillas— contigo, cuando hace poco me hizo el amor en su oficina. 

—¿Que dices idiota?

—Lo que escuchaste querida —dije entre dientes—, puede que si o que no esté comprometido contigo, pero ese hombre suspira por mi y ¿que crees? Pondría al mundo a mis pies si se lo pido. 

Se había puesto roja de la rabia, yo solo sonreí. 

Y cuando pensé que la cosa no podía estar mas de color hormiga, Dak Ho venia hacia aca, frunció el ceño al verme y luego a la mujer frente a mi, a su lado venían un par de hombres que eran árabes o algo asi, lo digo por la vestimenta. 

—¿Jenn? Nena, no te esperaba por aquí. —me sonrió.

—Quise darte una sorpresa, pero la sorprendida termine siendo yo... Conocí a Jeon Areum —señale a la mencionada—, felicidades por el compromiso, el anillo que le diste esta precioso. 

—¿De que...?

—Me iré, te espere demasiado tiempo Dak Ho. 

Camine hacia la salida, se que estoy exagerando, demasiado y dije que esperaria que me diera una maldita explicación, pero estoy realmente molesta. El señor Park venia con los cafés que le pedí, el venia tomándose el suyo.

—Debo irme señor Park —me dio las bolsas—, disfrute su café y el panecillo. 

—Gracias señorita. 

Camine hacia la parada de buses, mi teléfono estaba estallando de las llamadas de Dak Ho, pero estoy molesta y prefiero no hablarle ahora. 

Tome el bus hacia el restaurante de Ryosuke, quería pasar mi molestia con el, verlo me hará sentir bien. Baje del bus y camine un poco hacia su restaurante, al entrar pude ver que estaba lleno, pero no lograba verlo, hasta que una cabellera larga llamó mi atención, Ryosuke estaba hablando con una chica, ambos estaban sonriendo entre si, el se veía encantado con ella. 

Genial. 

Luego el abrió la puerta, le toco la espalda y la hizo pasar, mi ceño se frunció, mis pies me llevaron a la puerta y la toque dos veces con fuerza. Al ver que nadie abría lo hice de nuevo pero con mas fuerza. 

—¿Quien mier...? —me miró— ¿Jenn? Linda ¿que haces aqui? 

—¿Vine en mal momento? —trate de sonar lo más natural posible. 

—Para nada linda, pasa —tomo mi mano y me dejó entrar a su oficina, la mujer que estaba adentro se puso de pie—, ella es Hirai, mi amiga y socia. 

—Tu debes ser Jenn —asentí—, eres mas bonita de cerca, un gusto, Hirai. 

—Jenn —estreche su mano. 

—Los dejo ¿gustas algo de comer? 

—Oh no gracias. 

—Después hablamos —ella asintió y salió de la oficina— ¿Como supiste que esta es mi oficina?

—Te vi entrar con ella. 

—Ah ya, que bien que viniste —me rodeo con sus brazos y me dio un beso—, Kang me ha estado llamando para preguntarme si estas aquí. 

—No se lo digas. 

—¿Paso algo? 

—Nada importante, solo queria hablar contigo —el sonrió.

—Si es asi, entonces ven aquí. 

Tomo mi mano y dejo lo que tenía encima en la mesa, me hizo sentarme en su regazo, mis piernas quedaron de lado a lado, el me dio una sonrisa preciosa que le correspondi. 

Sentí mi teléfono vibrar en mi bolsillo, lo tome y era Dak Ho, cerré mis ojos al sentir los besos de Ryosuke en mi cuello, le conteste a Dak Ho y deje el celular en la mesa. 

—¿Me follaras aquí? —pregunté suavemente.

—¿Deseas que lo haga linda? 

—Si, follame cariño.. 

Me sentó sobre el escritorio, esta vez no queria juego previo, solamente con sentarme en su regazo y sentir la enorme erección en sus pantalones fue más que suficiente para mojarme.

El quito mi abrigo junto con la camisa y bajo mi brasier, solté un fuerte gemido cuando los ataco con su boca, su lengua hacia circulos sobre mi pezón mientras que pellizcaba el otro, mis manos se fueron a su cabello para darle un pequeño tirón de el, los labios de mi hombre soltaron mi seno para besar mi cuello robándome mas y mas gemidos, sus enormes manos tocaban cada parte de mi abdomen, bajaron hasta mi pantalón, mi espalda se curvo cuando el le dio un apretón a mi intimidad por encima del pantalón.

Ryosuke soltó el botón de mi pantalón, para sacarlo por completo de mis piernas, el soltó su pantalón, ambos reímos por lo desesperados que estábamos, Ryosuke abrio mis piernas para embestirme, ambos gemimos al sentirnos satisfechos, empuje un poco a mi hombres para hacerlo sentar en la silla conmigo encima. 

Mis caderas se movieron con ímpetu y así ganarme el gemido más sensual de Ryosuke, el tomo mis muñecas dejándolas en mi espalda mientras seguía moviéndome encima de su miembro. 

Ambos jadeamos al sentirnos tensos, aumente la velocidad de mis movimientos y deje salir mi orgasmo, el también lo hizo, soltó mis manos y pegué mi frente en su pecho. 

—Mierda.. Necesito agua —dijo y yo rei. 

Tome mi teléfono, sonreí al ver que Dak Ho seguía en la llamada, lo coloque en mi oido, me mordí el labio al escuchar como gruñía. Sabía lo que estaba haciendo, pero le toca quedarse con las ganas. 

—¿Tienes hambre? —colgue el telefono y le asenti. 

—Vísteme. 

—Con mucho gusto —me dio un corto beso. 

(...)

En la noche...

Ryosuke y yo almorzamos a gusto en su restaurante, después de semejante sesion de sexo en su oficina, decidimos que era mejor parar y comer. Me llevo al periódico, se quedó conmigo un poco y luego se fue ya que tenía asuntos que hacer. 

Pero después me recogió al periódico y me dejo en mi departamento, no sin antes comprarme muchos dulces, me encanta como me consiente y me trata. 

Dak Ho por otro lado no siguió llamándome, debe estar molesto conmigo por no haberlo dejado hablar, estaba celosa y si, exagere un poco. 

El timbre de mi departamento sonó, al abrir un enorme y enojado Dak Ho estaba frente a mi. 

—¿Me dejas pasar? 

Me hice a un lado para que pasara, no entendía el por que estaba quitándose el saco, la corbata y la camisa, cada prenda la lanzaba al suelo con brusquedad. Vino hacia mi y cerró la puerta con fuerza, me tomo en sus brazos y me alzo para llevarme hacia mi habitación, yo estaba perpleja ante su acción. 

—Lo que hiciste no se hace Jenn —me tomo de la mandíbula y acerco mi rostro al suyo—, me tuve que masturbar mientras escuchaba como Tanaka te follaba... ¿Pero sabes que? No estoy satisfecho, voy a romperte nena, por haberme dejado en la empresa. 

—Dak Ho... 

No pude hablar ya que estampo sus labios con los míos, traté de seguirle el beso pero no pude ya que estaba desesperado. Sentí como camino un poco hasta llegar a mi cama, se subió encima de esta conmigo aun en sus brazos. 

Mi cordura se había ido cuando empezó a tocarme con salvajismo, como si tuviera miedo de perderme. Así lo siento yo. 

Con suma rapidez se deshizo de mis prendas para dormir hasta dejarme desnuda. Dejo mis labios y se mordió los suyos mientras me miraba desnuda debajo de el. 

—Maldita sea... Eres tan perfecta —me miro a los ojos—, no me cansare de decirtelo. 

—Dak Ho..

—Te voy a follar... Y duro. 

Me volteo, quede boca abajo, hizo lo mismo que Ryosuke, me tomo de las muñecas y levantó mis caderas para después abrir mis piernas. Un fuerte gemido salió de mis labios al sentir la lengua de Dak Ho en mi intimidad. Me removí un poco pero su agarre en mis muñecas me lo impidió. Luego un fuerte azote fue dado a mi trasero. 

—Dak Ho —gemi—, por favor... —sentí las lagrimas salir de mis ojos, el muy imbécil sabe como hacer un buen oral. 

—Por favor ¿que? 

—Follame, por favor.. 

Escuche como su cinturón era abierto, yo traté de recuperarme por que iba a correrme pero el idiota este me lo impidió. 

El aire en mis pulmones salió cuando lo sentí entrar en mi de golpe, me soltó las muñecas para tomar mi cintura, sentí como sus dedos apretaban mi carne con fuerza mientras el soltaba gruñidos como una bestia. 

Solo voltee un poco, verlo con la cabeza hacia atrás y ese montón de venas en sus brazos y cuello, era algo realmente excitante. Dak Ho tomo mi cabello con fuerza mientras seguía hundiéndose en mi. 

El aumento sus embestidas hasta que se corrió al mismo tiempo que yo, me encanta cuando eso sucede por que siento como su miembro se retuerce dentro de mi. 

—Joder, necesito follarte de nuevo Jenn. 

Ambos caímos en la cama, mis piernas temblaban y estaba hecha un desastre, el solo se veia mas delicioso. 

—¿Quien es esa mujer? 

Decidí preguntarle directamente. 

—Nadie importante.. —jadeaba. 

—Me explicas en este instante quién es Dak Ho —esta vez soné más seria. 

—Es alguien con quien mi padre me quiere casar —miro hacia el techo—, ella no me importa lo más mínimo —me miró y sonrió—, ya le deje en claro que es contigo con quien quiero estar. 

—No sabia que tu padre hizo eso... ¿Porque no me lo dijiste en la cena? 

—Por que no quiero inmiscuirte en mis problemas nena —se giró un poco y se recargó de su brazo—, ya tengo suficientes encima... Pero ten claro una cosa Jenn, ella no me importa, no me interesa... Ya te tengo conmigo, no necesito mas. 

—Con lo que me acabas de decir, me queda claro que tu familia no me aceptara —dije en un murmullo. 

—Eso no me importa —respondió decidido—, me da igual lo que piense mi padre, me importas eres tu, asi que no pienses en nada mas ¿si? 

—Esta bien —me dio un beso— Oye... ¿En serio te masturbaste? —me rei.

—No lo menciones frente al idiota de Tanaka —soltó un bufido, yo me seguí riendo—, no es gracioso Jenn, no lo hagas de nuevo. 

—No prometo nada —me acerque a el para darle un beso—, tengo que bañarme, huelo sexo. 

Me iba a levantar pero se subió encima de mi y beso mi cuello. 

—No nena, aun queda mucha noche... Me quedaré contigo. 

—Esta bien. 

Se que no debería preocuparme por su padre, pero no puedo evitarlo, quería conocerlo y que supiera que si soy lo suficientemente mujer para Dak Ho, pero con lo que está tratando de hacer, puedo intuir que no es una buena persona. 

Espero que eso no traiga problemas más adelante.