497. EL DETECTIVE COLOMBO
Después de salir de la morgue y de hablar con Gerónimo, me dirijo a la prefectura para hacer el informe del caso de Cristal. Menos mal que Darío y Asiri se movieron rápido y quitaron toda sospecha de encima de ella. Ahora tengo que investigar quién la mató en realidad, porque, aunque sea una loca, se merece justicia. ¿Dónde habrá dejado a la bebé? ¿Será de Gerónimo?
—Detective —me llama una colega—, su sobrina Fiorella llamó. Dice que le rompieron unas cámaras de seguridad de la parte trasera de la galería, que cuando pueda se llegue allá.
—Gracias, detective —le respondo de inmediato.
No me gusta esto. Dejo este informe para después e iré a mirar qué pasa con eso. No sé por qué, pero no me gusta para nada; o le van a robar las pinturas o le van a hacer algo a ella. Me monto en el auto y llego al mismo tiempo que Evelin y Gabriel, con otro auto y unos técnicos.
—Gaby, ¿no estabas con Fabrizio? —pregunto en cuanto lo veo.
—Darío y Asiri se están encargando de eso. Vine a ver