Mundo de ficçãoIniciar sessão—Eso es todo lo que tengo hasta ahora —dijo Ezra con el ceño fruncido, la mandíbula tan tensa que parecía a punto de romperse.
Nosotros lo escuchábamos en silencio, atentos a cada palabra como si de ellas dependiera no solo la vida de Aylen, sino también la nuestra. —Aparentemente, tomó todo su dinero antes de desaparecer. Pero no contenta con eso, también le pidió prestado a Angel. Una suma considerable —continuó, con voz grave—. Angel me contó que Esther le dijo que quería empezar de cero, abrir un pequeño negocio, alejarse de todo esto y vivir en paz. Rodé los ojos ante semejante mentira. Ezra apretó los puños. —Obviamente todo eso era una farsa. Usó parte de su dinero para pagar a los cómplices. Y no solo eso… —su mirada se ensombreció—. Secuestró a la madre de la sirvienta de Aylen y la amenazó para que colaborara.<






