7. ¿Puedo abrazarte?
SIETE AÑOS ANTES:
VALERIK (19 años)
Valerik estaba sentado en el rincón más lejano de la casa de los Romanov.
Solo había accedido a ir porque no quería quedarse solo en casa.
Aquel lugar le traía demasiados recuerdos.
Todas las cosas de su madre seguían en el mismo lugar como si fuera a volver en cualquier momento.
Nada dolía tanto como haberla perdido.
Mientras miraba a la nada recordaba todo lo que había hecho para no perderla pero todo había resultado en vano.
Había muerto y no había podido evitarlo.
La rabia cruda seguía burbujeando en sus venas y dentro de él un niño clamaba por volver a ver la sonrisa que lo arreglaba todo, por regresar a los únicos brazos que le daban paz.
Si no hubiera sido por Dimitry estaría jodidamente solo, incluso aunque en ese momento lo estaba, sabía que podía contar con su amigo.
Valerik escuchó el sonido de los pasos acercándose, sin embargo, no miró en dirección a quien se acercaba, su vista siguió clavada en el agua cristalina de la piscina que era