—¿Cómo esta ella? —Oliver preguntó.
César soltó un suspiro y se sentó en una de las sillas de la sala.
—Físicamente esta bien. Dijo el doctor que sufrió un accidente, el cual provocó el nacimiento prematuro de nuestro hijo. Aunque él está bien, Victoria perdió la memoria. Ellos aun no saben si es temporal o definitiva. Pero tengo miedo hermano, no sabes como me duele verla a los ojos y notar que no hay nada para mí. Soy un total desconocido para ella.
Oliver se acercó a su hermano y le puso una mano en el hombro, tratando de ofrecerle algo de consuelo.
—Lo siento, César. No puedo ni imaginar lo difícil que debe ser para ti. Pero tenemos que ser fuertes, tanto por Victoria como por el bebé. Lo importante es que están vivos y ahora podemos trabajar juntos para ayudarla a recuperar sus recuerdos.
César asintió, aunque el peso de la situación aún lo oprimía.
—Lo sé, pero es tan frustrante. Todo lo que hemos pasado, todo lo que hemos luchado, y ahora parece que estamos de vuelta al princip