César estuvo a punto de decir algo cuando un enfermero llamó a Olivia.

—Doctora, la necesitamos en urgencias tres.

Olivia miró a César, se trataba de su esposa, sin embargo, no le dijo nada al respecto y luego siguió al enfermero.

César observó cómo Olivia se alejaba, dejando un rastro de incertidumbre en su corazón. A pesar de la urgencia y la necesidad de atención médica para su esposa, no pudo evitar sentir una punzada de preocupación por Olivia. Sabía que ella estaba cumpliendo con su deber como profesional de la salud, pero, aun así, no podía evitar pensar en lo que había pasado entre ellos en el pasado y cómo eso afectaría su interacción en el presente.

Con la mente aún llena de preguntas sin respuesta, César se obligó a concentrarse en el bienestar de su esposa y en las noticias que esperaba recibir del equipo médico. Mientras tanto, Olivia se dirigía hacia la sala de urgencias con el corazón lleno de emociones encontradas, consciente de que la vida los había reunido de una man