Capitulo 42

Moros.

Que los dioses tengan en su gloria la paz de mi familia.

Ya que en un momento como este, no existe la paz para nadie.

Esa mujer de cabello tan blanco como la espuma del mar en la costa y ojos poseedores de gran misterio se fue después de contar esa historia capaz de helar la piel de los dioses, nadie contaría con la existencia de tal grado de crueldad en una familia que siempre aparenta ser unida y amorosa.

Una capa de humo que solo oculta un gran infierno. No pude evitar sentirme identificado, después de todo mi familia es la misma porquería.

Con la única diferencia de que ellos no cortan manos, ellos destruyen todo tu ser poco a poco hasta que solo te dignas a vivir junto a la miseria que se volvió tu mente.

Mis hermanos e incluso mi padre, afrontamos eso por muchos años, lo admito con mucha pena y tristeza.

Solo algunos lograron la escapatoria a tal tortura, admire eso con envidia cuando vi llegar a mi hermano junto a sus dos hijos varones a buscar a su esposa, Sedna.

El hom
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP