Carlo:
Mikael pasó la noche con Axel en el hospital, justo ahora voy camino hacia allá porque el padre de Emma me llamó para avisarme que ella estaba en camino hacia allá, se había puesto mal.
Kurt, el padre de Emma y yo nos movilizamos toda la noche tratando de demostrar que Axel y Emma no tenían nada que ver con el secuestro de ese niño, pasaron toda la maldita noche recaudando pruebas y verificando que las pruebas que entregó Kurt no eran falsas.
Se demostró que Tamara falsificó el acta de nacimiento del niño y papeles que certificaban que el niño era de ella, por suerte Axel guardó todos esos papeles, con eso pensaba darle el apellido al niño, por suerte se supo a tiempo que el niño no era de el, ahora emitieron una orden de arresto contra Tamara y saber si hubo alguien más que pudo ayudarla a falsificar todos los papeles, porque está más que claro que todo esto no pudo haberlo hecho sola.
Llamamos a los padres de Axel y quedaron en venir de inmediato para acá, deberían estar en camino.
Llegué al hospital, con ropa para Axel y comida para Mika, algo también para el para que se cambiara. Entré a la habitación de Axel y por suerte ya no estaba esposado.
—Que bien que llegaste —Mikael suspiró—, necesito un café bien cargado.
—Ten —lo saqué de la bolsa y se lo di—, te traje ropa y algo de comer ¿Que han dicho?
—Gracias —tomó del café— pues, su Hipoacusia se aumentó, parece que perderá por completo la audición, pero hay que esperar que despierte para verificar si puede oír.
—Esperemos que si, El señor Julian me llamó para decirme que Emma viene para acá, parece que se descompuso en la celda y la traen en una ambulancia.
Mikael de inmediato se levantó.
—¿Que? ¿Ella está bien?
—No lo sé —negué—, en un momento iré a verla, aquí hay ropa para que te cambies, cuando regrese podrás verla, quédate aquí y llámame si hay algún cambio.
—Llámame por favor —su rostro era de preocupación.
—Lo haré.
Salí de la habitación y fui hasta donde ellos estarían, al llegar estaban sus padres, la señora Allen lloraba en los brazos de su esposos y mi corazón se aceleró ante ello, no puede pasar nada malo.
—¿Paso algo? —pregunte con un poco de temor.
—Emma tenía una baja de presión debido al encierro y por no comer nada —dijo Jamie—, la están revisando.
Suspiré —Pero ¿Que hace la policía aquí? Se supone que ella ya está libre de cargos —fruncí el ceño.
—Es para que Emma de una declaración... —Julian estaba molesto.
—¿De que? Por favor me está asustando..
El señor Julian se acercó a mi y me llevó hasta el otro lado de la sala de espera, su nariz y ojos estaban rojos, no sabía si era dolor o tristeza. Pero no me gustaba para nada.
—Escuchame.. A mi hija en la celda.. —no podía hablar—, una mujer abusó de ella, fue muy doloroso para Emma, tanto que la desgarró y por eso la policía está aquí, para tomar su declaración y que diga cómo pasó.
Me tambalee y me senté de golpe en la silla, estaba en shock, mi rosita había Sido abusada en ese lugar, sentí un nudo en la garganta y en el estómago.
—¿Por que le hicieron esto? ¿Por que?
—La mujer está en la cárcel, está en una celda de máxima seguridad, más tarde la interrogarán para saber el porque lo hizo —el se agachó a mi altura—, escúchame bien muchacho, ahora hay que ser un poco fuertes por mi niña, no la dejen sola ahora que los necesita, no deja que nadie se le acerque así que sean pacientes pero favor..
—Lo haremos señor —sonreí fallando en el intento—, esto no se puede quedar así.. me importa una m****a si es mujer, ella tiene que pagar por esto, no debió tocar a mi novia.
—Créeme muchacho, esto no se va a quedar así, yo me encargo de esto.
—No —negué— esto tengo y quiero hacerlo yo.
—No muchacho —negó—, lo que te pido que hagas es que cuides de mi niña ahora, yo me encargaré de que esa mujer se pudra en la cárcel —habló serio, tan serio que me asusté un poco.
—Está bien señor Allen.
Se sentó a mi lado y dio un par de palmadas en mi espalda.
—¿Cómo está Axel?
Sabía que todo esto lo tenía mal, pero intentaba ser fuerte por su esposa.
—Sigue dormido, parece que el golpe le afectó, podría perder la audición por completo.
—Esperemos que no sea así —hizo una larga pausa—, se que lo que te diré quizá te cause pánico pero.. Esa mujer recibirá su castigo —me miró—, por mi hija y mi familia estaría dispuesto a manchar mis manos de sangre y todo aquel que se atreva a lastimar a quienes amo, no vive para contarlo.
No sé si eso sonó como una amenaza... Pero si, me dió miedo, me asusto la manera de decirlo.
—Yo adoro a Emma señor, jamás le haría daño.
—No lo digo por ti o tus amigos, lo digo por esa mujer —miró el frente—, después de saber porqué lo hizo, me encargaré de que los gusanos se la coman.
Se levantó de la silla y se fué, me levanté de la silla de igual forma y caminé por los pasillos y busqué la habitación donde estaba Emma, después de buscar por casi media hora la encontré, entré a la habitación, ella estaba acostada de lado, tenía su pómulo herido y labio, tenía su muñeca vendada con el suero en su brazo. Con cuidado me acerqué a ella y me senté a su lado para después tomar su mano.
—Lo siento tanto mi amor —sentí mis ojos picar—, no debí dejarte sola en ese sitio, no te marchites por favor.
Ella abrió sus ojitos y me miró, estaba perdida en sus pensamientos.
—¿Seguirás queriéndome después de esto? —susurró.
—Por supuesto que si mi amor, te querré siempre —acaricie su cabello—, siempre.
Me daba pánico tocarla y que se alejara por miedo.
—Ella.. —su voz se quebró— me lastimó mucho.
—Ya, tranquila ¿Si? Ahora estás aquí y nadie podrá lastimarte, lo prometo.
—¿Me abrazas?
—Claro que si.
Me levanté de la silla y me acosté a su lado, la rodeé con mis brazos y ella se pegó a mi para soltar su llanto, era la primera vez que la escuchaba llorar, escucharla romperse así, hacía estragos en mi pecho y a la vez la ira crecía dentro de mi.
—Lo siento tanto Carlo —susurró.
—No lo sientas mi vida, no es tu culpa.. Nada de esto es tu culpa —acaricié su cabello y dejé un beso en el.
—¿Cómo está Axel? —alzó la vista y me miró con sus enormes ojos grises.
—Sigue dormido, Mikael está con el, estará bien.
No quise decirle nada para no agobiarla aún más, quiero que esté tranquila ahora.
—Eres muy malo para mentir Carlo.. Pero ahora no quiero hacer preguntas, me quedo tranquila con saber que este bien y ya —suspiró—, no me dejes sola por favor.
—Jamás lo haré mi vida, jamás.
—Carlo..—susurró.
—¿Si?
—Tengo miedo.
—Lo se mi bonita —ella me abrazó fuerte—, creeme que yo también lo tengo, pero no te dejare sola en esto ¿Está bien? Tendrás mis mimos y las ocurrencias de Mikael, también el amor de Axel, los tres estaremos para ti.
—Quiero ir a terapia después que salga de aquí —lloraba—, no quiero detener mi vida por esto, no puedo —sollozó—, ahora tengo miedo de que alguna mujer se me acerque, ni siquiera mi mamá me ha podido abrazar y eso me duele mucho..
—Lo se mi amor —le susurre—, nosotros te apoyaremos para lo que sea, estaremos los tres contigo, se podrás eres una chica fuerte, además de ser una Allen.
—Los Allen somos fuertes.. A veces.
—Pero lo son mi amor, todos somos fuertes hasta un cierto tiempo, justo ahora estás débil pero fuerte a la vez, eso es de admirar.. —bese su frente— Mikael querrá verte, pero tiene que cuidar a Axel.
—Yo vi como el policía lo golpeó, hay que hacer algo Carlo, no es justo lo que hicieron.
—Mikael puso la denuncia —suspiré—, ya está en proceso, tus tíos están ayudando en eso ¿Comiste?
—No tengo hambre, solo quiero dormir.
—Entonces hazlo bonita —la abracé más a mi— descansa para que veamos a Axel ¿Si?
—Esta bien —susurró—, gracias por quedarte mi amor, gracias.
Besé su cabeza de nuevo y acaricié su espalda para que se durmiera, aún pensaba en las palabras del señor Allen, me tenía un poco aturdido, pero por un lado quería saber que es lo que le hará a esa mujer por haber abusado así de Emma, no sin antes saber porque lo hizo, a la vez me asusta saber el motivo, siento que no me gustará nada.
Y no será nada bonito..