Por favor, prosiga.
Livy Clarke
La gente me usó toda la vida. Salí de aquella casa tan pronto como conseguí volver a la ciudad. Por supuesto que no dormí en el mismo lugar que Hardin. Era obvio que él no tenía ni idea de dónde estaba yo hasta ese momento.
Estaba sentada en un sillón, rodeada de hombres con corbata, con sus trajes oscuros, y solo conseguía sentir un vacío creciendo dentro de mí.
Todos me quitaron todo en los últimos años. ¡Nadie me quitaría nada más! Miré a Daren cuando entró en la sala. Aquel hombre, cuyo traje blanco deslumbraba toda la oscuridad del ambiente, tenía una sonrisa seductora en los labios. Era exactamente como aún lo recordaba.
Mi memoria aún no había vuelto, y él se aprovechó. Pretendía arrancarme hasta el último centavo si pudiera. Pretendía arrancarme a mi hija, solo para enloquecerme.
El juez se sentó a la mesa dos segundos después, pero yo seguí con la cabeza baja.
—Vamos a dar curso al caso. El señor Daren Holloway alega que su exmujer lo alejó de la niña. Además de d