Capítulo 249.
—No es él—, declaró Anthony dejando de ver el cadáver que Izan apenas reparó para detenerse, confiando en la palabra de su primo.
Nadie respondió, pero tampoco se movieron.
—Dije que no es Mateo —repitió sin levantar la voz.
Uno intentó decir algo. Anthony lo miró y enseguida se calló.
—Sigan buscando. Y no lo repitan otra vez—, demandó con un tono de voz enfadado, pero sin exaltarse.
Harper detuvo la brazada al verlo dejar el cuerpo. No estaba tan cerca aún, pero algo en su cuerpo aflojó, como si el peso se hubiese disipado de golpe.
No lloró. No suspiró. Simplemente giró hacia otro lado y siguió nadando, buscando a su esposo, porque iba a encontrarlo, así tuviera que estar toda la noche en ese sitio y todas sus fuerzas se fueran en eso.
Las hélices aún rugían sobre sus cabezas. La guerra no había terminado hasta que los últimos dos helicópteros de los Centinelas cayeran, pero era Leonardo y Asher los encargados de tal cosa.
Mateo no aparecía y cambiar eso era lo único que movía a t