Si, ser la peor escoria femenina ahora mismo es mi más grande pasión.
Después de todo, soy rubia, mis padres me nutren económicamente y ahora me parecía atractivo un chico al que antes no le daba ni la más mínima atención.
Un chico con novia.
Un camino basto y que me prohíbo explorar por mucho que ahora parezca tentador, ya que yo no planeo ni mucho menos deseo ser el motivo de dolor de alguna mujer despechada.
Por eso hoy cuando llegue a la universidad me dispuse una sola misión y es centrarme al máximo en mi último año de estudio, después de todo planeaba pasar de forma exitosa hasta la última asignatura de inglés para no tener inconvenientes al graduarme y elegir mi especialización.
La cual, aún no tenía del todo claro cual iba a ser.
—¿Odette? Te noto algo distraída. —Voltee a ver de inmediato a la persona a un lado de mi, extrañamente no es Amélie como siempre suele ser, hoy en especial es Eiden, el cual aún muestra los golpes en su rostro de la pelea del día anterior.
—S