Liam*
No sabía con certeza en qué momento se había perdido. Solo recordaba haber despertado en medio de la noche. Collin estaba acostada a su lado, serena, hermosa... y al mismo tiempo, cruelmente parecida a Colen.
Aquello fue como una daga clavándose en su pecho.
La mente de Liam no supo distinguir la diferencia. Solo veía la sombra del monstruo que lo había destruido. La mujer que invadía sus sueños y los convertía en pesadillas. Aquella que hizo que su cuerpo dejara de ser suyo, que lo destrozó sin piedad, que mató dentro de él todo lo que aún quedaba entero.
Sin pensar, huyó. Se levantó en el silencio de la noche, con el pecho agitado, y desapareció. Dejando atrás a Collin. Dejándose atrás a sí mismo.
Sabía que nunca más podría volver a ser el Liam que un día fue. Lo que Colen le arrebató... era irreversible.
Damon lo encontró días después, cuando rastreó su huella con la esperanza de traerlo de vuelta. Pero todo lo que Liam le ofreció fue una verdad fría y rota.
"¿Qué les diré, L