CAPÍTULO 99. Hijos de la venganza.
Capítulo 99
Hijos de la venganza.
La noticia del embarazo había sido una detonación lenta; no explotó de inmediato en la vida de Gabriel, sino que fue extendiéndose como un rumor cálido que obligaba a replantearlo todo.
En la celda, entre el frío del metal y la indiferencia de las paredes, su primera reacción —rabia, frustración— poco a poco se fue filtrando hasta convertirse en una mezcla extraña de alivio, esperanza y miedo.
Aliviado porque la verdad hallada tenía ya nombre y rostro (y porque, al menos, existía la posibilidad real de que la justicia llegara). Esperanzado porque su hijo significaba una continuidad que ningún dinero ni mentira podría arrebatarle. Y con miedo, porque era consciente de que su nuevo rol conllevaba riesgos que él no estaba dispuesto a transferir a Isabela ni al bebé.
La visita de Isabela esa tarde, fue breve y todo en ella fue tenso. Entró con el abrigo cerrado, la mirada dura y los ojos ligeramente hinchados por la falta de sueño.
Se sentó frente a Ga