Mundo ficciónIniciar sesiónSophie lo observó, confundida, tensa.
—¿La verdad? ¿Qué más podrías decirme que no duela, Damien?
Él se incorporó lentamente, caminó hasta el escritorio y tomó una carpeta vieja. El cuero estaba desgastado, las esquinas dobladas. La colocó frente a ella.—Esto lo recibí meses atrás. Justo después de conocerte. Mandé a un detective a investigar quién eras.
—¿Me investigaste? —sus palabras fueron un golpe seco.
—El informe que recibí hablaba de tu abuela. De la tienda de dulces que tenía en el centro, del pequeño edificio que era suyo… y de cómo todo terminó hipotecado hasta casi perderse.
Ella sintió un nudo en el pecho.—¿Y qué tiene eso que ver contigo? —preguntó, en voz baja.
Damien cerró los ojos un instant







