Salvando la vida de la frágil luna.
Alejandra había recobrado la consciencia, la pobre loba sentía todo su cuerpo adolorido, pero aún así hizo el esfuerzo por pedir ayuda.
— Por favor... alguien apiadese de mí... Ayúdenme a salvar a mis hijos...
Los estudiantes de preparatoria que pasaban por el puente, lograron escuchar esa lejana voz que pedía auxilio.
— ¿Escucharon? !Hay alguien debajo del puente, se escucha muy herida, bajemos a ayudar!
Los jóvenes y fuertes lobos bajaron de un salto, no pasó mucho tiempo para que encontrarán a la embarazada loba, ella estaba muy maltrecha, te iba heridas por todas partes, pero sobre todo tenía abundante sangrado vaginal, sus cachorros estaban muriendo.
— ¡Por la diosa, es la luna de la manada, rápido, tenemos que llevarla al hospital!
— Está sangrando mucho, ¿Y si no llega viva? ¡El Alfa nos mataría a todos!
— !Nos mataría de todas formas si no la ayudamos, quítate, yo mismo la cargaré! un valiente joven lobo no dudó en intentar llegar con Alejandra con vida al