El nacimiento del cachorro Romano.
Increíblemente el rey Salvatore fue a internar a su hijo a un centro de adicciones para seres sobrenaturales, en ese lugar tenían todo lo que se necesitaba para contener a seres poderosos que consumían drogas, o alcohol.
— ¡Papá, no te atrevas a meterme aquí, ya te dije que no soy un adicto, solo me estaba divirtiendo con mi novia, no me dejes aquí!
Lionel se les removía a sus tíos fuertemente, pero era imposible que pudiera contra la fuerza de los tres, y su padre para grandes males tenía extremos remedios, no iba a permitir que uno de sus hijos equivocara el camino.
— Es por tu bien, Lionel, ¿Qué no ves como se ha quedado tu madre llorando? Tienes que convertirte en un lobo responsable, maduro, que tenga autocontrol, no puedes dejarte llevar por el mal camino.
— ¡Lo que pasa es que tú no me quieres, solo quieres a Leo porque se parece a ti, y a Lorenzo porque sigue tus pasos y está haciendo una familia, pero como yo no quiero sentar cabeza me traes a este lugar a encerra