La diosa luna había sido testigo que de no decir esas últimas palabras. La boba habría sido asesinada, en su dolor por perder a su familia, el Alfa no iba a soportar el que su luna gustara de otro y se hubiese olvidado de él.

— Prepara todo Damiano, saldremos de inmediato al territorio Dark Moon.

— Alfa, necesito alimentos, tomar una ducha, he venido desde muy lejos, estoy muy cansada...

— Que le den alimento a esta loba, debes apresurarte a estar lista loba... Por cierto, ¿Además del dinero por supuesto, qué más ganas tú con venir a decirme en dónde está mi luna?

— Yo... Quiero separarla de joshua, que me deje el camino libre para reconquistarlo. Si Alejandra sigue en la manada él no va a voltear a verme.

— Retirate, uno de mis empleados te llevará a la cocina. Tienes una hora. — El Alfa llamó a una de las mucamas para que llevara a Carmina a comer. Entonces se quedó a solas con su hermano.

— ¿Lo puedes creer? ¡Por fin noticias de mi cuñada, tres años que no teníamo