359. EL RECLAMO DE RAFE
ELENA:
Estaba abochornada al recobrar todas mis memorias. Había fallado en mi misión de Loba Lunar Guardiana hasta ahora. Las dos gemelas que debía haber educado desde su nacimiento habían crecido como humanas, sin ningún conocimiento de los seres sobrenaturales. Era un asunto que debía solucionar lo antes posible.
—Elena —la voz de Rafe me detuvo. Giré, sintiendo cómo mi corazón latía acelerado. —¿Puedo hacerte una pregunta?
Lo miré detenidamente. Podía sentir todas sus esencias; era mi pareja destinada por la Diosa Luna, lo que indicaba que era un formidable guerrero. Asentí, cruzando los brazos, queriendo cubrir mi corazón en un intento por ocultar su palpitar.
—¿De dónde conociste a Vorn? —preguntó, muy serio.
El nombre de Vorn resonó en mi interior, despertando memorias enterradas bajo capas de emociones conflictivas. Mis labios se entreabrieron, tragando saliva antes de poder responder. Rafe, ese guerrero que la Diosa Luna había marcado como mi pareja, me observaba con i