Capítulo 33 – Sombras del pasado.
POV Martina
El aire de esa tarde olía a tierra húmeda, a hojas secas y a lluvia contenida. Era un olor extraño, casi como si el mundo respirara antes de anunciar una tormenta. Desde que nos habíamos mudado a la finca por orden de Graciela, todo parecía tranquilo en apariencia: los guardias patrullaban, los rosales florecían, y Santiago fingía serenidad. Pero yo sabía que no era paz. Era una pausa.
La clase de silencio que precede a los gritos.
Estaba en el pequeño estudio que me habían armado junto al jardín, tratando de concentrarme en unos bocetos. Dibujaba flores. No porque quisiera, sino porque me recordaban que la vida aún era capaz de brotar entre los escombros. Fue entonces cuando escuché los pasos de Santiago acercándose. Lo reconocí antes de verlo. Ese ritmo firme, pesado. El mismo que usaba cuando algo no estaba bien.
—¿Sucede algo? —pregunté, limpiándome las manos manchadas de carboncillo.
Él no contestó. Solo se sentó frente a mí, en la silla baja de madera, y colocó una c