Capítulo 12. Celos
Emily
—Estás preciosa —dice Sophie, ajustando un mechón rebelde detrás de mi oreja.
Su sonrisa es tan amplia que me hace sonreír también, aunque por dentro no me sienta del todo segura de mi apariencia.
—¿En verdad lo crees? —pregunto con timidez.
—¡Por supuesto! Si yo fuera Leonardo, me casaría contigo ahora mismo.
—No digas tonterías. —Sonrío, bajando la mirada.
Me miro en el espejo y no reconozco a la chica que me devuelve la mirada. El blazer blanco cae sobre mis hombros, cubriendo el top del mismo color que deja al descubierto una franja de mi abdomen, haciéndome sentir expuesta. Y los shorts de lentejuelas plateadas brillan tanto que se asemejan a una bola disco.
No sé si esto es demasiado.
Aunque estoy acostumbrada a recibir atención, la verdad es que la mayor parte del tiempo preferiría pasar inadvertida.
—Te ves increíble —dice Sophie detrás de mí, con esa voz que siempre parece saber cómo calmarme—. Quita esa cara de arrepentimiento. Vamos a ir a ese club y nos la vamos a