¡La rubia había arreglado la situación en un dos por tres!
— ¡Listo! — Dijo triunfal — Ahora tenemos como justificar el gasto.
Moviendo delante del rostro de la pelirroja una hoja con toda la información.
— ¡Eres terriblemente peligrosa Abby!
— ¡Lo tomaré como un cumplido!
—Menos mal que somos amigas, no quiero ni imaginarme lo que harías si fueras mi enemiga.
— ¡Eso no sería posible cariño, te amo como si fueras mi hermanita, y ahora, deberíamos ir de compras!
— ¡Pero tenemos clase!
—No, el profesor solo recibirá hoy a quienes tengan que revaluar…
— ¿Y estás segura de que tú no eres parte de ese grupo?
—Completamente segura, cariño, gracias a ti, ¿Ya se te olvidó que el último trabajo lo entregamos a nombre de las dos?
—Mmm….
—Vamos Helena, no te hagas la pesada.
—Está bien, pero ya no me metas más en problemas…
Desde lejos, los ojos oscuros y profundos del becario de Antropología seguían a Helena por todas partes.
El joven se estaba comenzando a obsesionar con la pelirroja desde qu