Mundo ficciónIniciar sesión
Mi biblioteca
  • PARTICIPA Y GANA Concurso
  • Português
  • Para autores
    Recompensas de autoresPara autores
  • Ranking
  • Navegar
    Todos
    Paranormal
    Ciencia Ficción
    urbano
    Hombre-lobo
    Clásico
    Suspenso
    Oriental
    Historia
    Otros tipos
    Romántica
    Fantasía
    Personajes Sobrenaturales
    Acción
    Realista
    Mística
    Chick Lit
    LGBT
    Guerra
    Adolescente
    Crimen
  • Inicio
InicioDespués de Amelia
Después de Amelia

Después de AmeliaES

Romántica
Lily  Completo
goodnovel16goodnovel
9.8
Reseñas insuficientes
30Capítulos
6.0Kleídos
Leer
Añadido
compartir: 
  • Copiar
Denunciar
Resumen
Índice

Sinopsis

ValienteObsesiónDramaCruelDolorPoderosoembarazada

Amelia es una bailarina de ballet que trabaja para uno de los teatros más famosos de la ciudad. Bruno, un empresario a medias se obsesiona con ella y no para hasta convertirla en su mujer. Con los meses se convierte en mamá y es separada de su pequeño. Amelia tendrá que dejar de ser ella misma y actuar como una persona fría y sin sentimientos, puesto que es lo único que la mantiene en pie para lograr su principal objetivo; encontrar a su hijo.

Leer más
Después de Amelia Novelas Online Descarga gratuita de PDF

Último capítulo

  • 30. Una familia feliz, al fin

    Los finales felices no existen, son solamente nuevos inicios.Amelia había leído lo anterior en algún libro viejo y cuánta razón encerraba aquel pensamiento. Ahora se encontraba en camino a la hacienda donde su hijo se había criado durante los últimos cuatro casi cinco años, esta vez Cristina su madre la acompañaba. También iba John, por supuesto.Amelia recordaba que en la noche anterior Santiago le pidió a Perla que fuera su novia, quizá iba a tener un noviazgo corto, todo lo contrario, a la relación de Rubí y Samuel que duró unos tres o cuatro años quizá y ni hablar de ella que simplemente se comprometió sin un previo noviazgo, es que la vida es así, distinta para todos.Cuando llegó Mateo estaba en el pórtico meciéndose de un lado para otro en una banca de madera a modo de columpio. Solo se dio cuenta que e

  • 29. Después de Ágata

    Amelia y John aprovecharon el viaje para dejarse envolver por los sentimientos que tenían uno hacia el otro, pese a todo lo que pasó y aunque ella se sintió traicionada, decidió no guardar rencor en su corazón para John, además comprobar por su cuenta lo bien que estaba Mateo a su lado la hizo pensar en la posibilidad de formar un futuro junto a él a fin de cuentas ella se enamoró como nunca antes lo hizo. También tomó en consideración que John le devolvió a su hijo. De camino a la ciudad en la que vivían se desviaron unos minutos para conocer un hermoso lago y el pueblo donde quedaba; era un lugar tranquilo. Turístico, pero tranquilo. Comieron en uno de los muchos restaurantes que encontraron y fueron a caminar por la plaza en la que John compró un anillo; sencillo, pero bonito sin que Amelia se diera cuenta. Después fueron al muelle más famoso del lago, justo al f

  • 28. Una fotografía para recordar

    John no se imaginaba la reacción de Amelia cuando estuviera frente a su niño. Tenía claro que talvez todo iba a llegar a su fin, en cambio estaba seguro de lo que quería y lo que más deseaba era hacer su vida junto a Amelia. No solo se había enamorado de ella, sino que también estuvo cuidando a Mateo como si fuera su propio hijo. —Me debes una explicación —dijo Amelia. —Y te la daré, por ahora disfruta de Mateo —sugirió él. —¿Nos regresaremos hoy mismo? ¿Está todo listo para llevármelo; ¿su ropa sus juguetes, todo? —preguntó Amelia. —No te lo puedes llevar —ordenó. —Es mi hijo. ¿Cómo te atreves a decirme eso? —Ahora también es mi hijo —comentó. —Mateo no es tu hijo, tú lo separaste de mi lado. —Le romperíamos el corazón si se entera que su padre es el maldito de Bruno y no yo —aseguró—. Sobre todo, porque yo si he cumplido con ese rol desde que él era un bebé hasta el día de hoy y quiero que sepas que lo hice con todo e

  • 27. John y Mateo

    John llevó a Amelia hasta su casa, ella no pudo conocer muy bien el lugar la primera vez que llegó, pero lo poco que estuvo al alcance de su vista le pareció hermoso y acogedor. La casa era pequeña, sin embargo, tenía un bonito y espacioso jardín.Entraron y se sentaron en la sala, era de madrugada y hacía frío. Amelia estaba temblando, pero John buscó una colcha pequeña para abrigarla y también preparó chocolate caliente.—¿Alguna vez estuviste casado? —preguntó ella con curiosidad.—Nunca —respondió él.—¿Has vivido sólo, desde siempre en esta casa? —cuestionó.—Sí, desde que la compré.—Ganas muy bien entonces.—Parte del dinero fue una herencia que me dio mi padre.—¿Él murió?—No, a&uac

  • 26. Rubí se casa

    La mañana traía con sigo aroma a paz y a felicidad. La alegría de una amiga era el triunfo para las demás.Rubí estaba nerviosa porque su día al fin había llegado; por más que lo intentaba no dejaba de sentirse ansiosa, deseaba que las cosas salieran perfectas. Se sentó con sus amigas en el comedor a disfrutar de un rico desayuno antes de empezar con lo demás. De pronto se puso en pie de golpe y se movió hasta la sala. Perla y Amelia se miraron entre sí y caminaron en su dirección.—¿Qué te sucede? —preguntó Amelia intrigada.—Hoy me caso con el amor de mi vida —dijo con lágrimas en los ojos.—Es un verdadero motivo para estar contentas —comentó Perla.—¿No se dan cuenta? No tengo un papá que me lleve hasta el altar —se lamentó.—Y ¿Qu&e

  • 25. Una hermana para Mateo

    Amelia quería renunciar a su trabajo, necesitaba hacerlo. No podía permitir que Bruno le hiciera daño nuevamente, por suerte ahora se sentía un poco más segura; John conocía su historia y ella estaba convencida que la iba a proteger. Los dos se habían dado cuenta de lo que sentían uno por el otro y estaban dispuestos a dejar florecer ese sentimiento. John tenía algo tan especial que hizo que Amelia desistiera de cerrar su corazón al amor de un hombre.Aunque ya había pasado una semana Ágata seguía aterrada después de lo que sucedió con Bruno y pese a que él no se había aparecido por el club ella sabía muy bien que lo haría en cualquier momento. Así que tenía que actuar con perspicacia, no podía permitir que otra vez ese monstruo encontrara su lado vulnerable. Pensando en el siguiente paso que podía dar, recordó

  • 24. El nuevo socio del club

    Cuando Amelia llegó a casa se dio cuenta que algo no estaba bien con sus amigas, la luz de la cocina estaba encendida y la de la habitación de Perla también.Entró rápidamente en su recámara y tomó un baño ligero, se envolvió en una bata y después se dirigió al cuarto que estaba entre abierto. Tocó con cautela y sus amigas le indicaron que podía seguir.Perla estaba acostada sobre las piernas de Rubí hecha un mar de lágrimas.—Que ha pasado? —preguntó—. ¿De qué me perdí? —indagó sorprendida pensando que debía ser algo complicado, de lo contrario sus amigas estuvieran durmiendo.—Perla no tuvo un buen día —dijo Rubí.—¿A qué te refieres?Amelia sabía perfectamente que no se trataba de algo sobre amor. Perla no tenía

  • 23. Amelia y John

    Amelia volvió a su casa el lunes después de la cena. Sus amigas no estaban tan contentas, pese a que habían hablado por teléfono el día anterior y las dos sabían dónde estaba ella.—¿Dónde te habías metido? —cuestionó Rubí.—Como te dije ayer por teléfono, estaba con Edward en su casa de playa.—¿Qué rayos estás haciendo Amelia? —preguntó Perla con decepción.—¿Cómo así? ¿Qué rayos estoy haciendo de qué? —replicó sorprendida por la actitud de las dos.—Tu hijo es lo más importante ahora, pero parece que a ti ya se te olvidó que Mateo existe —Rubí estaba molesta, se notaba en cada palabra que mencionaba.—¿Cómo te atreves a decirme eso a mí? A mí que no hago m&aac

También te gustarán

  • Cuando Sus Ojos Abrieron
    Cuando Sus Ojos AbrieronSimple Silence7.3M leídos
  • Esposa Pecadora
    Esposa Pecadora Sixteenth Child3.9M leídos
  • Déjeme ir, Sr. Hill
    Déjeme ir, Sr. HillSuperficie del Sur3.6M leídos
  • La Heredera Divorciada Billonaria
    La Heredera Divorciada BillonariaQuiero comer carne3.3M leídos
  • La Pequeña Novia del Sr. Mu
    La Pequeña Novia del Sr. MuGato con sabor a limón2.5M leídos
  • ¡Buenas noches, Señor Ares!
    ¡Buenas noches, Señor Ares!Lenguaje de paz2.3M leídos

Libros interesantes del mismo período

  • HUG ME
  • ALENNA
  • Prisionera De Un Magnate
  • Crown, Love and a cup coffee
  • bajo la lluvia todos son felices
  • KARMA
  • Club Cuervos Negros
  • La Cautiva Del Mafioso
Comentarios Deje su reseña en la aplicación
No hay comentarios
30 chapters
1. El lago de los cisnes
Después de Amelia/Lily
Amelia se movía rítmicamente al compás de la melodía «El lago de los cisnes» su control corporal tenía encantado a todo el público. Su cuerpo simplemente se dejaba llevar por el sonido de las notas musicales. Su precisión era asombrosa; sus manos dibujaban figuras en el aire mientras bailaban junto a ella. Entre pequeños saltos, patadas perfectas y giros suaves parecía que flotaba sobre el escenario, cuando inclinaba sus pies para ponerse de puntillas daba la impresión de que se elevaba unos centímetros del suelo.Bruno su más grande admirador la observaba desde un rincón; todo en su interior se alteraba cada vez que veía como aquella jovencita se movía. Estaba ansioso por qué la noche diera fin, quería cortejarla como solía hacerlo desde que la conoció, llevaba un par de meses asistiendo a cada una de sus presentaciones y al final s
Leer más
2. Miedo y flores negras
Después de Amelia/Lily
Bruno era un empresario al que le gustaba hacer negocios turbios para incrementar las ganancias de una fábrica de zapatos que era de su propiedad. Él estaba acostumbrado a conseguir lo que deseaba incluyendo mujeres; jóvenes en su mayoría. Ofreciéndoles dinero y regalos costosos se volvían presas vulnerables y fáciles de pescar. Todas llegaban hasta sus brazos sin mayor trabajo y esfuerzo. Con Amelia había sido la excepción; ella le dejó claro desde un inicio que no era una mujer como las que estaba acostumbrado a tratar y esa era la razón por la que la deseaba físicamente de una manera perturbadora.—Claudia —llamó a su asistente.—Ordene, don Bruno —respondió ella.—Necesito que compres una joya, algo magnífico, una pulsera o un collar.—Por supuesto que sí —dijo Claudia.—No importa el pr
Leer más
3. Un monstruo en su interior
Después de Amelia/Lily
Perla y Rubí estaban preocupadas. La noche anterior Amelia llegó a casa en horas de la madrugada, aquello no era lo extraño; pues solía suceder siempre que tenía eventos de gran magnitud. Lo raro era que no quería salir de su habitación ni siquiera para desayunar. Ambas ya habían hecho hasta lo imposible para hablar con ella, pero ninguna tuvo éxito.—Estoy bien —decía Amelia desde el interior.—Sal de ahí y hablemos —le rogaba Perla.—Mas tarde, estoy muy cansada —intentó tranquilizar a ambas.—Sabes bien que no es solo cansancio —insistía Rubí.Amelia conocía a sus amigas y sabía que no la dejarían en paz hasta saber que había sucedido así que después de varias horas las dejó entrar en su recámara. Las dos llevaban comida para ella, la pobre no hab
Leer más
4. Recuerdos que matan
Después de Amelia/Lily
Amelia estaba temblando de miedo cuando terminó de contarle a sus amigas lo que había sucedido. Ellas se acercaron y la abrazaron «No hay mal que un abrazo no cure» solía decir Amelia, pero esta vez era diferente.—¿Cómo viviré con los recuerdos? —pensó en voz alta.—Hay amiga —se lamentó Perla.—¿Pues cómo va a ser? —preguntó Rubí—. Normal, lo afrontas y ya. Si tienes que buscar ayuda profesional, pues la buscas.—En tus labios suena tan sencillo —se quejó Amelia.—No lo estoy viviendo en carne propia, pero me duele saber que le pasó a una de mis hermanas y justo por eso quiero que seas fuerte.—Yo también las considero mis hermanas ¿Saben?—No estás sola. Aquí estamos para ti.Amelia recibió castigo por parte de
Leer más
5. Príncipe azul
Después de Amelia/Lily
Amelia estaba segura que su retraso era simplemente cuestión de nervios y estrés. Su periodo nunca fue regular así que esperar unos días más, no era algo que provocara miedo en ella.Al paso de unas semanas fue a hacerse una prueba de embarazo en sangre para poder salir de las dudas, aunque evidentemente esta ya no era necesaria. Las náuseas matutinas se hicieron presentes, comenzó a sentir cansancio y apetito fuera de lo normal. Pensó que se trataba de algo psicológico así que decidió que dejaría de pensar cosas que ni al caso y no le comentó a nadie sobre lo que estaba pasando ni siquiera a sus dos mejores amigas. Cualquiera que fuera el resultado no quería compartirlo todavía. Estaba tan confundida que ni siquiera ella sabía lo que tenía que hacer.Cuando fue por los resultados no abrió el sobre, no estaba preparada para confirmar lo que sosp
Leer más
6. Luna llena
Después de Amelia/Lily
Amelia no se quitaba las manos del vientre intentando sentir a su bebé en constante movimiento. Estaba llena de miedo, no quería perder a su hijo sin haberlo conocido.La preocupación carcomía su tranquilidad, el camino al hospital se le hizo eterno y por más que lo intentaba no dejaba de llorar. Las palabras de sus amigas no lograban aplacar la angustia que se había adueñado de ella, entró caminando muy despacio al auto y cada mal movimiento le parecía gravísimo, se bajó con el mismo cuidado y pidió que la llevarán en silla de ruedas hasta el segundo piso. Quizá exageraba, pero nada le importaba más que salvar a su bebé.En cuanto la obstetra la vio llegar, decidió atenderla. Sus amigas pasaron con ella al respectivo consultorio.—No es tan grave —dijo la doctora después de revisarla—. El bebé está en perf
Leer más
7. Mateo
Después de Amelia/Lily
Mateo cumplió el primer mes de haber nacido, era un niño afortunado, sin duda lo era. Tenía unas tías locas que lo adoraban y una madre que daba la vida por él, pese a su situación lo único que deseaba era llenar de amor a su pequeño y cuidarlo por el resto de sus días. Lo demás salía sobrando.Desde que Amelia dejó su trabajo como bailarina de ballet en uno de los teatros más importantes de la cuidad pasaron muchas cosas de las que no tenía detalles. Perla y Rubí eran dos mujeres muy alejadas al entorno en el que se manejaba Amelia, así que no era de extrañarse que no pudieran brindarle información suficiente de lo que había sucedido allá afuera mientras ella pasó los últimos meses en reposo absoluto para que su hijo naciera a término.Para celebrar el primer mes de vida de Mateo, Amelia quiso salir a dar un p
Leer más
8. ¿Dónde está Mateo?
Después de Amelia/Lily
Después de varias semanas y de hacer las averiguaciones correspondientes, Bruno confirmó que era el padre de Mateo.—Maldita perra ¿Cómo fue capaz de ocultarme un hijo a mí? —preguntaba molesto.—A lo mejor fue por miedo —respondió John, mano derecha y hombre de confianza de Bruno.—Como sea, sabes que Rita no puede enterarse que ese niño es mi hijo. Es más, nadie puede saber que lo es.—Comprendo jefe. ¿Qué piensa hacer al respecto?—Llevarlo lejos, dónde nadie sepa que existe —dijo esbozando una sonrisa maliciosa.—Eso es secuestro —replicó John al mismo tiempo que se llevaba una botella de cerveza a la boca.—Claro que no, es mi hijo. Forzaré la patria potestad a mi favor sin que nadie se involucre —explicó—. ¿Además tú crees que te he in
Leer más
9. Corazón roto
Después de Amelia/Lily
Amelia sintió que le arrancaron una parte del corazón, le dolía no tener a su hijo con ella. No comprendía nada de lo que estaba sucediendo. Buscó en todos los lugares que se le pudieran ocurrir y no encontró una sola pista que la llevara hasta el paradero de su bebé.De lo único que estaba segura era que quien había sido capaz de separarlos tenía que pagar y de eso se iba a encargar ella, personalmente.Con el extravío de Mateo la obligaron a ser otra, nunca había sentido tanto odio por la gente, pero ahora habían despertado en ella una parte que no tenía idea que existía dentro de su cuerpo. Aquella fuerza interior le hacía tener los peores pensamientos que nunca imaginó tener.Después de darle muchas vueltas al asunto pensó en Bruno como el posible autor de lo que estaba sucediendo y tuvo muchas ganas de asesinarlo con sus propi
Leer más
10. Falta de cordura
Después de Amelia/Lily
«La señorita Amelia Fiore Altamar es encontrada culpable y se condena a cadena perpetua por el asesinato del menor Mateo Fiore Altamar»Las palabras del juez resonaron en la cabeza de Amelia, otra vez el destino le jugaba una muy mala broma, broma que tenía autor y el mismo se había encargado de colocar cada pieza en el lugar correcto para que ella fuera encerrada por siempre en una cárcel.Algunas semanas antes.Amelia fue detenida como sospechosa por el posible asesinato de su primogénito. Después de verla actuar tan fría y tan seca en cuanto al supuesto secuestro de su hijo las personas comenzaron a lanzar rumores sobre que posiblemente ella estaba loca, en su mayoría la gente no había visto a Amelia embarazada y tampoco la vieron con ningún recién nacido. Decían que era cuestión de querer llamar la atención, que siempre la habían sentido extra
Leer más
Leer más
  • Quiénes somos

    Sobre nosotrosTérminos de usoPolíticas de privacidad
  • Contacto

    ColaboraciónPalabras clave
  • Redes Sociales

    FacebookFacebook grupoinstagram