Capítulo 100. Lo Que Se Dice en la Sombra.
**Laura**
La cena había sido sencilla, familiar. Nada demasiado elaborado: una lasaña casera hecha por María Clara, pan artesanal, vino tinto. El tipo de velada que me hacía sentir parte del mundo de los De la Espriella sin tener que vestirme como en una gala.
Carlos Alberto estaba más relajado que de costumbre. Incluso había hecho un par de chistes. Beatriz reía con esa elegancia suya, como si el peso de los años y las tragedias familiares no la hubieran alcanzado del todo. Y Camilo… Camilo estaba guapo. De esos días en que lo miraba y pensaba: *cómo carajos logré que un hombre así me amara*.
—¿Todo bien, amor? —me susurró, mientras me servía un poco más de vino.
—Perfecto —le respondí, y lo besé en la mejilla.
Valentina y Alejandro no estaban. Habían preferido una noche íntima. Se les notaba aún en reconstrucción. Pero esta cena no tenía por qué ser más que eso: una cena tranquila. Hasta que fui al baño.
Me levanté y caminé por el pasillo largo del segundo piso, hasta que escuché un