Quería ahorcala ahora mismo, sentia como mi cuerpo temblaba y no era por el frio que estaba haciendo en el lugar, era por la rabia que recorría mi cuerpo de solo imaginar que la maldita estaba embarazada. Alejo la mirada de ella para ponerla en Bris.
—Vas a pagar esto, mataste a mi hijo para que tu zorra tuviera uno contigo, ¿ese siempre fue el plan? —digo apretando los dientes.
—Deja de decir estupideces, jamas estaria con esa mujer, me enferma, me da asco —escucho el jadeo de esas mujer y coloco de nuevo la mirada en ella.
—¿Como puedes decir eso?, ahora que tengo un hijo tuyo.
—¡Ese hijo no es mio!, no me creas estupido, ¿de quien es?, ¿de mi padre?, o embaucaste a otro imbecil para que hiciera lo que querías.
—Con el unico hombre que he estado es contigo.
—Bueno ya, no quiero escuchar las estupideces que ustedes dos hacen, toma una desicion ahora mismo, Bris, porque no me va importar que me mates, que lo hagan, pero antes me la cargo a ella —digo levantándome mi arma en su d