Capítulo 977
Sin embargo, nada pasó.

En lugar de la alarma, sonó el característico ding del arranque. Luciana abrió los ojos de golpe: ¡la contraseña era su aniversario de boda!

Y no el día de la ceremonia que todo Muonio recordaba, sino la fecha en que firmaron el acta, la que casi nadie conocía.

¿De verdad Alejandro la guardaba en la memoria… y como clave de su portátil?

El corazón le retumbó en el pecho, pero no había tiempo para sentimientos. Apretó los dientes y se concentró en lo urgente.

Sus dedos volaron sobre el teclado; terminó en minutos. Luego marcó el número de Alfonso.

—¿Sí?

—Soy yo —susurró—. Todo listo de este lado. Espera el momento y actúa.

—Entendido.

Cortó, cerró la laptop y salió del estudio.

***

A la mañana siguiente

Durante el desayuno, Alejandro no paraba de bostezar; se le escapaban lágrimas de sueño. Patricia le sirvió el café y preguntó:

—¿Durmió mal, señor Guzmán?

—Al contrario —respondió, rascándose la nuca—. Caí como tronco, dormí más profundo que nunca… pero sigo cans
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP