—¿Por qué haces todo esto? — Una vez me dijiste que no podía comprarla ... — Recordó Vittorio extendiendo la pluma de vuelta a Ellis. — Bueno, mira lo que acabo de hacer: yo compré a la señorita por medio millón de dólares. --------------- Todo lo que Ellis Barker anhelaba era pagar el último pago de la hipoteca de la casa heredada por ella y su hermano, Jason, y así cerrar las deudas de su hermano. Por lo menos hasta que la joven llegue al banco y su destino cruce con el de Vittorio Amorielle, un mafioso que no medirá esfuerzos para tener lo que desea y de aquel instante en adelante su objeto de codicia era Ellis.
Leer másEl equipo de maquillaje y vestuario vino hacia mí, transformándome de una joven común en una visión de elegancia y seducción para el baile de máscaras. Mi vestido rojo sangre era deslumbrante, y la máscara a juego ocultaba parte de mi rostro, dejando solo mis ojos a la vista. Nunca me había sentido tan sexy y atractiva como esa noche.Federica, siempre presente para apoyarme, observó mi transformación y sonrió con aprobación. "Estás absolutamente deslumbrante, Catarina. Estás perfecta."Le sonreí de vuelta, agradecida por sus palabras de aliento. "Gracias, Federica. Hoy es la noche en que mostraré a todos que merezco un lugar en la familia. Comenzando por la reunión con los rusos."Ella asintió, comprendiendo la importancia de la noche para mí. "Ten cuidado, Catarina, y no olvides qui&eacut
La Casa Atellani era un frenesí de preparativos, donde la emoción flotaba en el aire como una suave melodía. Los empleados corrían de un lado a otro, asegurándose de que todo estuviera perfecto para el gran evento del año: la boda de Ellis Barker y Vittorio Amorielle. El sonido de risas y conversaciones animadas resonaba por los pasillos, creando una atmósfera festiva.Mientras los preparativos estaban en pleno apogeo, Vittorio Amorielle se encontraba en una de las muchas habitaciones de la casa con sus primos: Alessandro, Luca, Giovanni, Marco y Carlo, junto con su hijo Jake. En medio de un mar de trajes, Vittorio salió del armario con un elegante traje beige. Se enfrentó a los demás con una sonrisa, ansioso por conocer su opinión."¿Qué les parece?" Preguntó Vittorio, girando para mostrar el traje.Jake sonrió, admirando a su padre. "Te ves guapo, pap&aacut
Vittorio Amorielle sostenía a Ellis Barker en sus brazos, la cercanía de sus cuerpos creando una conexión íntima que trascendía las palabras. El sol bañaba el lugar, pintándolo todo con tonos dorados mientras compartían ese momento único.Vittorio rompió el silencio, su voz profunda resonando en el tranquilo aire. "Me desesperé cuando desperté y no te vi a mi lado, Ellis."Ellis levantó suavemente la mano para acariciar el rostro de Vittorio, transmitiendo consuelo con su toque suave. "Lo siento, Vitinho. Pero necesitaba resolver todos los asuntos para que pudiéramos ser verdaderamente felices juntos."Vittorio la miró a los ojos, su expresión mezclando alivio y amor. "Estás hablando de Ângelo Messina, ¿verdad?"Ellis asintió, manteniendo la mirada firme. "Sí, pero también me alegré mucho de verte
Finalmente, emergiendo de las sombras y el humo, aparecieron Giovanni y Luca, llevando a Rocco entre ellos. Su figura estaba inconsciente, el cuerpo pesado en los brazos de los hermanos. Sofía corrió hacia ellos, el corazón apretado por la preocupación."¿Dónde está Vittorio?" preguntó inmediatamente, sus ojos buscando una respuesta en los rostros cansados de Giovanni y Luca.Giovanni bajó la mirada, la expresión sombría. "No pudimos encontrarlo."La noticia golpeó a Sofía como un puñetazo en el estómago. Sintió el frío de la pérdida comenzar a insinuarse, pero la negación rápidamente tomó el control."¿Qué? No, él debe estar allí dentro. ¡Tienen que sacarlo de allí!" exclamó Sofía, su voz mezclando desesperación y determinación.Luca l
El jet privado de Rang Bone aterrizó suavemente en la pista de Milán, trayendo de vuelta a Ellis Barker a la ciudad que alguna vez fue escenario de recuerdos tanto felices como dolorosos. A medida que descendía la escalera del avión, Ellis bajó con determinación, con la mirada fija en la SUV negra que la esperaba. Rang Bone la siguió, y en el momento en que sus pies tocaron el suelo, Ellis se volvió hacia él, expresando su gratitud."Gracias por todo", expresó Ellis.Rang sonrió, respondiendo con su típica serenidad, "Siempre a sus órdenes, Donna Barker".Ellis ingresó al vehículo, y el conductor inició el recorrido por las calles de Milán. El viaje los llevó a la majestuosa Casa Atellani, la mansión que Vittorio le presentó en su primera visita a la ciudad. La imponente mansión se extendía por cinco pisos, alb
Ellis Barker y Rang salieron de la habitación, dejando atrás el cuerpo inerte de Messina. La tensión flotaba en el aire mientras atravesaban los pasillos de la imponente mansión Petrov, cada paso resonando la violencia que se había desencadenado.Rang miró a Ellis con una mezcla de admiración e incredulidad. "Nunca imaginé que tendrías el valor para algo así, Ellis".Ellis, con determinación en los ojos, respondió sin vacilar: "Haría cualquier cosa por mi familia, Rang. Absolutamente cualquier cosa".Ambos recorrieron los pasillos de la mansión Petrov, pasando por cuerpos caídos, resultado de la acción despiadada de los hombres de Rang. En medio del camino, Ellis, con una voz firme, rompió el silencio: "¿Quién está aquí?"."Todos, Ellis", respondió Rang, sus pasos firmes resonando en las paredes destroza
Último capítulo