—¡Mamá!
En la habitación de la sección de quemaduras, Mónica apenas podía contener la furia que sentía hacia su madre.
—¿Cómo se te ocurre ir a pelear con Luciana? ¡Te dije mil veces que no actuaras por tu cuenta!
Clara, sintiéndose culpable, bajó la voz:
—No pensé que Alejandro estaría ahí, y tu padre… antes él no era así. Ahora, ¿qué hacemos?
¿Qué hacer?
A Mónica le dolía tanto la cabeza como las heridas de su cuerpo. ¿No estaba ya lo bastante desgraciada, con su piel quemada y ese aspecto que la atormentaba cada minuto? Y encima, ahora salía a la luz que Luciana era hija de Ricardo… ¡un desastre más!
¿Qué pensaría Alex de ella, sabiendo todo eso? ¿Creería que ella también había abusado o maltratado a Luciana de alguna forma? ¿La vería con desprecio?
Escapar no era una opción. Tal vez era mejor adelantarse antes de que Alejandro acudiera a cuestionarla…
***
Mientras tanto, porque Luciana estaba embarazada, Delio buscó a la doctora Alondra para que la revisara.
—Fue un episodio de ins