Al no tener nada que aportar a la conversación decido quedarme callada y escuchar lo que están diciendo, de momentos Alessio me mira de reojo. Cuando terminan de hablar, la mujer se pasa a retirar, quedando solo nosotros tres una vez más, antes de que las cosas se vuelvan a poner incómodas, fui a buscar mi libreta y se la entregué a Alessio.—Ahí está todo lo que tu papá me contó sobre el ritual de invocación, pero debido a que su memoria ha empezado a fallarle, no recuerda el último paso, quiero pensar que el último paso es intuitivo.El rey toma mi libreta y empieza a hojearla, para hacer más amena su lectura, Nox le invita a tomar asiento en la silla que está detrás del escritorio. Alessio camina hasta la silla y toma asiento, todavía tiene la vista puesta en la libreta, al ver que está muy entretenido, Darius aprovecha este momento para comer su desayuno.Cuando termina de leer, deja la librea sobre el escritorio y posa su mirada sobre mí, sus ojos violetas me contemplan con absol
—Pero sé que has arriesgado mucho para conseguir la información del ritual y por eso dejaré que hagas el viaje— Sus palabras están llenas de tristeza y pesadumbre, pero al mismo tiempo de orgullo y felicidad. —Solo, por favor no hagas nada arriesgado ni peligroso... no quiero perderte...—Lo prometo, no haré nada arriesgado... — Le dedico una pequeña sonrisa y beso su mejilla varias veces. —Apenas termine con el ritual volveré al campamento, lo prometo.—Bien, si ves que la situación es muy peligrosa para ti, vuelve... no importa si hiciste el ritual o no, tu seguridad es más importante para mí ¿Entendiste?—Si Alessio...El rey y yo nos besamos con suavidad y luego nos alejamos un poco, mirándonos a los ojos de forma apasionada, un pequeño rubor se asoma por mis mejillas y apoyo mi cabeza sobre su hombro, suspiro suavemente y cierro los ojos por unos momentos.—Ginny... de verdad, me preocupa mucho dejarte ir sola... pero entiendo tus ansias por ayudar y el esfuerzo que le has puesto
Caminamos por el interior del templo abandonado, nuestros pasos resuenan por el con ecos que parecen infinitos, los pilares de mármol siguen en pie, sosteniendo el peso del templo como enormes centinelas, en las paredes hay varias pinturas que cuentan la historia de Chandra y su creación sobre los licántropos. Con la curiosidad desbordando por cada poro de mi piel, me pongo a revisar cada pintura.Todo inicia con el sol y la luna, al parecer, Chandra tiene como esposa a la Diosa del Sol, Nebesa, ambos crearon el mundo y poblaron el cielo con sus hijos Dioses… poco a poco cada quien empezó a poner cada uno de sus creaciones en el mundo.—Aparece el Dios creador de los elfos— La voz de Revann se escucha a unos metros de distancia de mí. —de hecho… hay una gran historia aquí— Su voz estaba llena de emoción y cierta incredulidad, pude notar como sus ojos vagaban por el extenso mural que mostraban las paredes.—¿Y qué dice? — Me acerque a ella para saber que estaba viendo.—Bueno... solo l
Me levanto rápido de mi lugar y me giro sobre mis talones, Revann estaba de rodillas frente a un hombre algo de piel blanca y cabellos negros como la noche, sus ojos parecían ser plateados y noto que tiene algunas runas marcadas en ambos brazos, sus ropas son igual de primitivas que las de los hombres lobos que viven en los bosques, pero con un toque de elegancia.—Es raro ver a un humano aquí, pero sé que te ha traído aquí, así que no te molestes en darme una explicación, pequeña Ginebra — Sonrió de forma amplia y complaciente, estaba claro que esperaba mi visita o al menos esa es la sensación que me da. —Antes de hablar sobre lo que has venido, primero debes saber lo que ocurrió antes.Chandra camina hacia el mural roto, pasa sus manos con suavidad, como si temiera recordar lo que ese mural decía, incluso emite un aura de tristeza y melancolía, parece que este tema es difícil para él, espero poder ayudarle o al menos ser una oyente adecuada para que desahogue sus penas, que parece q
—¿Es eso posible?—¡Claro! — Exclamó feliz mientras se giraba sobre sus talones y volteo a verme con esa sonrisa lupina. —Pero como todo, se requiere de un sacrificio.—Quizás me arrepienta de esto, pero ¿Que se necesitó hacer para que recuperar mi alma de loba?—Morir.He de admitir que dicha revelación que me ha dejado conmocionada y aturdida, no esperaba eso, de hecho... no esperaba nada, pero ahora que sé que tengo que morir para recuperar mi alma de loba, no me da muchas ganas de hacerlo, pero por otro lado, sé que tengo que hacer algo si quiero que la Luna de Sangre surja.—¿Es completamente necesario que muera? — Susurré en voz baja mientras me encogía en mi lugar.—Sí, para que tu alma reencarne como lo que debes ser, una licántropa— Su tono de voz tan tranquilo y relajado puede poner los nervios de punta a cualquiera.—Entiendo eso, pero... — Me quedo pensando unos momentos intentado hilar las ideas en mi cabeza, todo es tan repentino y confuso, que apenas entiendo del todo l
Alessio.El dolor es abrumador, como si mi corazón estuviera siendo aplastado por un peso invisible. Cada latido es un golpe brutal que resuena en mi pecho, amenazando con romperme en mil pedazos. El grito que sale de mi garganta es primitivo, una mezcla de desesperación y angustia que parece surgir de las profundidades de mi alma. Mis rodillas ceden bajo el peso de la emoción, y caigo al suelo con un golpe seco, mis manos apretadas contra mi pecho en un intento inútil de contener el dolor que se desborda. La sensación de impotencia es total, como si estuviera siendo consumido por una fuerza que no puedo controlar.—¡Ginebra! — Grité al cielo mientras algunas lágrimas caían de mis ojos.Mi mirada se perdía en el vacío, como si la nada misma se hubiera convertido en un abismo sin fondo que me tragaba por completo. La ausencia de Ginebra era como un agujero negro que absorbía toda la luz y la vida a su alrededor, dejándome sumido en una oscuridad total. La pregunta resonaba en mi mente
Siento cómo mis garras se clavan en las palmas de mis manos con una fuerza que parece ir en aumento, y el dolor agudo se mezcla con la sensación de mi propia sangre brotando lentamente. La presión es tan intensa que tengo que apoyarme en el suelo, estirando mi cuerpo en un intento desesperado por aliviar el tormento que me consume. Mis huesos siguen crujiendo y reacomodándose, como si mi cuerpo mismo estuviera siendo reescrito y rehecho de acuerdo a algún plan desconocido.La sorpresa y la confusión se mezclan con el dolor mientras trato de recordar las notas de Ginebra, pero no hay ninguna mención de esta segunda transformación en la Luna de Sangre. ¿Cómo pudimos haber pasado por alto este detalle crucial? La realización llega demasiado tarde, y ahora solo puedo esperar a que el proceso termine y pueda evaluar el alcance de lo que hemos desatado. La información será crucial para las generaciones futuras, si es que logramos sobrevivir a este ordeal. La idea de pasar esta experiencia a
Mi estupor es tan profundo que siento que todo a mi alrededor ha desaparecido, que estoy solo en un mundo vacío y silencioso. Pero entonces, los gritos de guerra de los humanos rompen el silencio, y mi atención se vuelve hacia ellos. Siguen decididos a seguir con esta guerra, a pesar de que saben que no tienen ninguna posibilidad de ganar. La determinación en sus voces es admirable, pero también es inútil.Un rugido salvaje se cuela por mi garganta, y sin dudarlo me lanzo hacia el soldado que está enfrente de mí. Mi cuerpo se mueve con una velocidad y una fuerza que no sabía que tenía, y en cuestión de segundos, el soldado está despedazado en el suelo. El resto de mis hombres siguen mi ejemplo, y se abalanzan contra los soldados de Dorian con una ferocidad que es casi palpable. Algunos de los soldados retroceden asustados, pero otros más osados siguen adelante, teniendo una muerte dolorosa y lenta.La batalla es intensa y caótica, con gritos y rugidos que llenan el aire. Pero yo estoy