Elise
Época actual
Alistair estaba más temeroso de comer desde que se había atragantado con esos caramelos. Yo también sentía un pánico terrible, pero intentaba no demostrárselo y animarlo a recuperar la confianza en los alimentos.
—Eso, mi amor —le dije cuando tragó—. Eres el niño más valiente.
Alistair me sonrió con entusiasmo y luego me preguntó por el enorme jardín que su padre le había prometido. Pensar en ello me daba dolor de estómago, pero al mismo tiempo me llenaba de esperanza. Quizás tendríamos más libertad y alguien notaría que nos tenía en su poder.
—Ya elegí la casa que más te gustó, mi amor —le respondí—. Papá nos dejará jugar allí.
Esperaba que aquello fuera cierto, pero por lo que decía Andrei cada noche, tal vez solo dejaría que Alistair visitara los jardines.
Mi hijo gritó emocionado. Su padre estaba llegando. Segundos después, confirmé que así era, por lo que seguí a Alistair para recibir a Andrei.
—Hola —saludé con el tono más cariñoso que pude, mientras veía cómo