—Necesitamos anticiparnos, no seguir reaccionando —dijo Carla, dejando caer una carpeta repleta de documentos sobre la mesa del salón de conferencias.
—Estoy de acuerdo —intervino Parker, acomodándose los lentes—. Si seguimos esperando a que Maurice mueva ficha, él dictará el ritmo del juego. Y no vamos a ganar así.
Dani se apoyó en el respaldo de la silla, cruzando los brazos.
—Entonces necesitamos un plan que él no pueda predecir.
—Uno que ni Isabella conozca completamente —añadió Carla con voz baja—. No porque no confiemos en ella, sino porque la está vigilando. Todo lo que ella sabe, él también lo sabrá tarde o temprano.
Parker asintió. El ambiente era tenso pero cargado de determinación.
—¿Tenemos algo sólido?
—Sí —respondió Carla, mostrando en su tableta un esquema complejo—. Basado en las últimas transferencias de señal, descubrimos una secuencia que podría corresponder al nuevo núcleo operativo de Delphi. No sabemos con exactitud dónde está, pero el patrón energético no