Leandro
Pisar este pueblo me enferma. Voy a la hacienda esperando encontrar a Demetry o a Liah, ya que en su casa no estaba y nada. ¿Dónde te metes, presumida?
Sin embargo, encuentro al capataz con ínfulas de dueño y señor tratando muy mal a los empleados hasta que me ve y baja la guardia.
—Señor Koller, no sabía que venía.
—Eso es evidente. Qué manera de tratar a los empleados que ni los jefes hacen, ¿quién te ha dado ese derecho?
—A veces debo poner carácter.
—No te extralimites con tu carácter, no me agrada. —Hace un mal gesto, pero no estoy para este tipo en el momento ¾. ¿Mi hermano?
—El señor Demetry está en el pueblo. Últimamente, está muy raro.
—¿A qué te refieres?
—Se la pasa encerrado en el despacho, en la empresa del señor Messer o curioseando por el sur y eso, no es bueno. Se puede meter en problemas.
—¿Por qué?
—Todo el mundo sabe que al sur es mejor no ir, y si uno va es mejor pasar desapercibido. Hay gente peligrosa.
—Gracias por la información. ¿Conoces a todos en esta