Luego de ver los resultados, Theo y Anya deciden ir al ginecólogo para comenzar con los chequeos y ver las recomendaciones del médico.

El médico ve los resultados y les da una fecha probable de parto, para el mes de septiembre.

Definitivamente, la pareja se siente como en un sueño. Cada uno estaba viviendo las cosas de diferente manera.

Por un lado, Theo viviendo algo que se había negado a vivir, y por el otro, Anya viviendo lo que le habían negado a vivir.

En el tema del ballet, el médico dijo que podía continuar practicándolo, más sabiendo que ella ya llevaba tiempo haciéndolo, incluso dijo que podía practicarlo hasta en el segundo trimestre, claro con algunas modificaciones.

La recomendación era evitar saltos, giros rápidos, extensiones extremas o algún movimiento que pueda generar pérdida de equilibrio, lo que ahora hiciera debía ser más suave.

Aquello fue música para los oídos de Anya, ella podría seguir estudiando y tal como lo habían planeado, trataría de estar en el institut