Olivia es el mejor secreto guardado del más grande farmacéutico de la ciudad, la hija ilegítima a la que ama con su alma, pero esconde con su vida. Cuando decide traicionar al hijo de su mejor amigo le pone en riesgo. Sebastian Caine, va decidido a destruir a la hija de su peor enemigo, sin embargo, ella es una mujer guapísima, a cargo de una niña y con un trabajo muy peculiar. ¿Será que Sebastian cumple con su venganza o el karma le atrapará?
Leer másCliente nuevo
¡Qué pereza da moverse!
Al menos tenía un departamento, sí, en un feo vecindario, pero económico y con buena calefacción y ventilación, hay excelentes espacios y está casi decorado, la cama está tibia y maravillosa.
—Teeea. Tía. Tía. O.
Mi despertador natural (Mily) ya avisó que es hora de desayunar.
Me metí en al baño y como siempre duré lo necesario para no oler a ninguno de esos cerdos en mi cuerpo, restregué lo más que pude cada espacio de mi piel y me aseguré luego de llenarlo de loción y aceite. Me vestí con los primeros vaqueros que encontré y la blusa. Cuando salí de la habitación Mily ya tenía el desayuno listo para las dos, mi sobrina de 4 años todo lo investiga y todo lo hace.
— Tía O, ¿por qué hoy llevas el cabello en moño?
— Nena, es que está muy mojado y quería comer caliente — Probé los huevos y tomé asiento. — ¿Tu mamá?
— Dejó eso — Me levanté y tomé el papel.
Desdoblé a hoja para leer lo que mi hermana tenía que decir, me encontré la impresionante caligrafía y su magnífica ortografía, Niza es perfecta en muchas coas excepto en las esenciales, criar a su hija. No podía creer que esta vez hubiese ido tan lejos, definitivamente estaba mal de la cabeza. Se había ido. Ha abandonado a la niña, me dejó con una niña de cuatro años. De nuevo se fue y nos dejó.
Exactamente había decidido odiar a mi hermana para la eternidad, sin embargo me acaba de dejar una pequeña responsabilidad que come y es traviesa, lo más importante no está en edad de estar sola en un apartamento cuya puerta se abre con darle un empujoncito.
“Bla. Bla. Blá... Me voy, te dejo a la niña y sus papeles.”
¡Claro!
Lo mala madre no se le quita así de fácil.
¡¡Mala madre!!
¡Hasta yo tengo más sentido de responsabilidad!
Al parecer, no tuve inteligencia para reconocer la verdad, desde que Niza dijo “volver por la niña”, que había dejado las drogas... Que ya estaba más seria debí mandarla de paseo.
Quién sabe a dónde se fue, pero cuando vuelva por dinero... No entiendo por qué le creí.
—¿Qué dice?—Preguntó la niña.
— Mi amor, ella no va a venir hasta dentro de una buena temporada.
— Lo sabía —Respondió y continuó comiendo su desayuno. — ¿Qué vas a hacer conmigo?
Y esa sí que era una buena pregunta, porque me quedaban solo dos opciones pagaba la comida o una niñera y el bar... ese de mala muerte con hombres calenturientos no era la mejor opción, pero para meter a una niña y que alguien la cuidara por mí.
Sí, Niza está vez lo había arruinado, firmé los documentos, en la tarde se los llevaría a un abogado, que me sacaría la plata de un mes, pero sería legal, Milena, mi sobrina, pasaría a ser mi hija.
— Tú… Tienes que ir hoy al restaurante conmigo, una de las chicas te van a cuidar.
¡Me molesta que haga esto!
Niza sabe que yo adoro a la niña, pero odio llevarla a ese bar de mala muerte, la forma en la que te educan marca tu vida. La nena se arregló tranquila como siempre, es feliz ... Al menos por ahora, continúa estando feliz e inocente.
Tomé su mano para bajar del autobús, durante toda la caminata no paró de canturrear, no lo hace mal, me encantaría tener para pagarle clases de canto, pero con lo que produce mi cuerpo… Claro está… No puedo.
Entré y como siempre empezaron a maullar.
Mi nombre laboral es la Loba, nombre que me ha dado la furia que me provocan algunos clientes. Soy una… vamos a simplificar, mi trabajo es uno de los más viejos de la historia. en palabras refinadas. Trabajo en un oculto y no tan barato bar a las afueras del la ciudad. Hombres exclusivos visitan el lugar y ocupan los servicios de las chicas; porque son tan finos que no pueden conquistar a una mujer y necesitan saber que somos libres de ir y venir a casa, pero no tanto como para ir a la policía, porque la mayoría le debemos dinero a nuestro un hombre que cree que compró el derecho para vender todo lo que originalmente es nuestro. Desde nuestro cuerpo e incluso la vida. Yo por ejemplo, le debo la cuna, la leche, las mantillas de Mily y las deudas de por los vicios que tiene mi hermana, la mala madre, por supuesto, que si hubiese elegido mejor, Niza hoy estaría muerta y yo no hubiese tenido que sorprenderme porque la mujer abandonó a su hija. La mayoría de nosotras somos obligadas a ejercitarnos, cuidar la alimentación y a cambio nuestros clientes traen exámenes mensuales.
Desde hace unos años soy lo que se puede considerar la puta estrella, puesto que de mi vagina se pagan la mayor parte de las cuentas de ese imbécil.
Últimamente esto va de caída y los hombres nos han dejado de buscar porque sus mujeres saben que se hace aquí.
— ¿Tía por qué hacen eso?—Preguntó disgustada.
— ¿Maullar?—La pequeña asintió.— Loquera, nena. — Soltó mi mano para ir con Rossy la maquillista.
— ¿La cuidas por hoy?—Pregunté a mi amiga y Mily aplaudió con una sonrisa mientras bricoteaba, Rossy esbozó una amplia sonrisa antes de asentir y extender sus brazos hacia la pequeña.
— Claro que sí — ambas se fueron cotilleando.
— Loba, ¡cliente nuevo!—gritó el barman.
¡Hola, lectores! Muchas gracias por leer Venganza del millonario. Espero lo hayan disfrutado en todo momento y estén listos para disfrutar más de Mainvillage. Acá en Buenovela están disponibles otras de mis novelas solo con buscar Mainvillage entre ellas pueden leer: El corazón del empresarioNovela que narra la historia de Carrick Burwish.Sinopsis.Carrick Burwish es el empresario que todos quieren que sea, pero en el único negocio que fracasado constantemente es el amor y la paternidad, está dispuesto a conseguirlo todo y para ello le ofrecerá a la mujer de su vida un trato inigualable. Volviendo loco al jefe Narra la historia de Alonso.SinopsisLucrecia es una mujer de veintiocho años con una hija de catorce, ha enviudado y por eso necesita un trabajo y una nueva rutina. Entonces, después de mudarse de ciudad y tras muc
Novela ya disponible en Buenovela, al estar gratis solo accedes por la web o con el enlace. Mainvillage, febrero. Miré a mi familia sonriente entrar en mi apartamento a través de la ventana seguí meneando el chocolate en la copa de vino, miré a mis primos, hermanos, tíos, amigos y padres ingresar a la habitación. Mi hermana Oli, fue la primera en saltar al sofá con una sonrisa y gritar sorpresa, le llené de besos y le hice reír, luego miré a mi tía O, a Tío Sebas, a mis papás y sus parejas, a mis medios hermanos sonreír. Mi hermano Sergio el cual no tardó en acercarse a besarme junto con el resto, entre los brazos de mi hermano me permití llorar y el ambiente festivo desapareció cuando se dieron cuenta de que no era un llanto festivo. El mundo cambia en segundos, eso lo tenemos claro, sin embargo las decisiones que hay que tomar cuando la vida cambia realmente son dolorosas. Hace unas horas era la novia de un político, la compañera sex
Cinco años más tarde Sebastian y Milo estaban de cumpleaños, se lo estaban tomando muy en serio, estaban por construir la pieza más grande de legos de la historia en el jardín. Sebastian estaba cargando a su hija Olimpia, les había parecido adecuado después de que Alonso pasara nueve meses rogándole sy la pequeña era un clon de su padre, para ser irónicos. La única diferencia era el cabello pelirrojo y unos colochos nunca antes vistos en su familia, los suyos eran bucles, mientras los de su madre eran los menos cerrados. Olivia vio ala bebé de un año. Cargada entre los brazos de su papá, le dio un beso a la pequeña y escuchó los gritos de uno de los gemelos. —Mamá, mi hermano mayor está aquí—Olivia rió y Sebastianhizo lo mismo. —Ja ja jaaa —escucharon a Olimpia. —¿Qué te hace gracia? —Son muy tontitos. —Lo son —dijo su papá y los tres fueron a saludar a Sergio, el cual estaba d
Silvia vio a Sebastian ingresar al hospital en su propio pie, mientras lo tomaba la mano de su esposa en la camilla. Vio a Xavier ingresar inconsciente rodeado por varios paramédicos. Sebastian no quería soltar a Olivia y ella no podía creer que su tía fuese capaz de tanto daño, tanto odio. Le siguió hasta donde los médicos le dejaron ingresar y le tomó de los hombros. Sebastian suspiró asustado y cansado por toda la situación innecesaria que habían vivido él, Olivia y sus hijos a causa del odio de su tía. Sebastian vio a sus cuatro primas. Se quedó ahí parado entre la puerta que le conducía hacia el amor de su vida y sus hijos no nacidos y sus primas que estaban por vivir el día más triste de sus vidas. —¿Está muerta? —preguntó Sadra. —Está muerta —Confirmó. Sus primas asintieron y Silvia fue la primera en abrazarle. Sebastian le rodeó con sus brazos y pidió que fueran a una sala privada, no sin antes asegurarse
Sebastian se interpuso entre su mujer y su tía. La mayor sonrió y le dijo que por favor se sentaran en la cama. Olivia vio a Sianne apuntándoles con dos pistolas como si fuese una especie de Sicario, no hacía falta mucho para darse cuenta de que la mujer había estado planeando meticulosamente aquel evento. Sebastian le tomó de la mano y continuó cubriéndole con su cuerpo como si fuese un escudo humano. No contaba con que su esposa se abalanzara contra su tía, la mujer pensó que eran dos contra uno, Sianne, se había preparado para matarles porque todo el mundo sabía que era un riesgo y cuando uno se convierte en un riego para los demás tiene que saber qué hacer. Ella en algún momento tuvo dos opciones irse o pelear, la mujer eligió irse, enterrar la cabeza. Esperar la muerte de su sobrino y deshacerse de la drogadicta de Silvia. Sus hijas no le preocupaban porque las tres eran muy manejables y Roberto, su esposo, mucho menos, pero, Sebastian no se murió y sus precaucion
Olivia estaba frente a la mansión Pieth, viosu hijo abrazándose con Emilia Pieth como si realmente fuese su abuela. Se giró hacia Arturo y preguntó: —¿Estás seguro? —Sergio es mi alma gemela, tú mi hermana, obvio sí. —Olivia, ¿dónde están tus maletas y las de Sebastian?—preguntó Emilia. —Sebastian yyo sabemos que no somos Pieths y que esta es una actividad familiar. —Tienes dos niños registrados con ese apellido —Comentó Emilia. —Eres de la familia. —Vamos a ser hermanos mayores así que estarán muy ocupados viendo al bebé. —Felicidades—Respondieron todos y Olivia sonrió nerviosa, le dio un beso a sus hijos y le advirtió a Arturo que podía devolverles cuando estuviesen insoportables y más locos que de costumbre. La mujer se subió en el asiento trasero y llamó a su esposo para saber si se veían en el hospital o si pasaba por él, Sebastian aceptó que le recogiera, estaba fuera del ba
Último capítulo