Mundo ficciónIniciar sesiónLos guerreros de Mooncliff despertaron uno a uno, sus cuerpos rígidos y cubiertos de heridas, pero ninguno se quejó. Sabían que cada segundo podía ser el inicio de otro ataque. Fenris se irguió en medio de la formación, su mirada recorriendo el lugar.
—No podemos quedarnos aquí mucho tiempo. El olor de la sangre atraerá a otros enemigos, ya sean sombras de Kaelith o depredadores del bosque.
Rafe, mientras limpiaba su espada, asintió.
—Necesitamos un lugar más alto, donde podamos ver al enemigo antes de que él nos vea a nosotros. Y necesitamos tiempo para atender a los heridos.
Liora, con el rostro pálido y el cuerpo tembloroso, añadió:
—Casi no me queda energía. Si hubiera otro ataque grande… no estoy segura de poder resistirlo.
Seraphine se incorporó lentamente, aunque aún estaba d







