Perspectiva de Kany.
La confesión de Zayd me dejó helada, este hombre era capaz de sacarme de mis casillas y seguir manteniéndome tranquila.
—¿Qué quieres decir con eso?
—Lo que has escuchado, no desconfíes de mí porque no te haría daño. En serio que no, pero simplemente no puedo decir algo que no le veo relevancia mencionar.
—Sé bien que por mucho que te pregunte qué era a lo que se refería Maryam, no me lo vas a decir. Pero confiaré en ti cuando me dices que no es algo de relevancia o algo que me perjudique, al final si quisieras verme arruinada no hubieras impedido mi matrimonio con Mustafa.
Él no dijo nada, su mirada siempre era la misma cuando me veía. Al final se dio la vuelta y siguió trabajando delante de aquella laptop.
El silencio era roto únicamente por el sonido del teclado, pero en nosotros no había una sola palabra. Esto de cierta manera era incómodo, pero al mismo tiempo me gustaba verlo fijamente.
—¿Qué sucede, Kany? —él lanzó un suspiro de frustración mientras todavía